Deseando a los ciudadanos del mundo una feliz navidad y un próspero año nuevo escribo estas líneas.
Vivimos cambios tan importantes en todo el mundo que es imposible negar que vivimos una nueva era.
A los salvadoreños nos corresponde en febrero del 2019 la oportunidad de elegir un nuevo presidente y lo más importante esta vez es que tenemos la oportunidad de cambiar de régimen y no solo gobierno.
Cambiar de gobierno sería continuar con las políticas neoliberales que los partidos de izquierda y derecha han desarrollado los últimos cuarenta años que fuerzan a trabajar en la informalidad, a dividir la familia al necesitar emigrar, crea delincuencia, corrompe personas e instituciones y finalmente enriquece a quiénes han apoyado está corruptas políticas.
Cambio de régimen es diferente pues además de cambiar de gobierno debemos cambiar la estructura de gobierno, debemos instrumentar la honradez en el manejo del gobierno y sus instituciones, castigar ejemplarmente la corrupción, enseñar a los políticos que desempeñar un cargo es un honor, pues se sirve al pueblo y que su salario y prestaciones deben ser las que el pueblo esté dispuesto a pagar. Servir como funcionario público y gozar de seguros médicos, privilegios y bonos que el pueblo no recibe, no está obligado a pagarlos por lo que esta práctica debe terminar.
Con el recorte de despilfarro y prebendas podremos llevar mejor preparación a los maestros, mejorar sus salarios y llevar educación de calidad a todo el país.
¡Cambio de régimen es lo que necesitamos!
Es importante salvadoreño con derecho a votar que tengan claro que la decisión está en su conciencia a la hora emitir el voto.
Sabes que se dan fraudes electorales, el más reciente lo vivimos en marzo de este año, cuando fueron impuestos los diputados que habían sido electos, pero son los quienes les hacen el mandado a los patrones.
La única forma de que el fraude no se dé es que el candidato ganador obtenga más de 52 % de los votos en la primera vuelta, cómo recién sucedió en México.
Esto implica sacrificio, madrugar y llevar a la familia a votar.
Así de fácil es lograr un cambio de régimen.
Ya sabes que las escobas, las láminas y las mentiras de los empleados que repiten consignas de sus amos te han llevado a vivir en la miseria y esto tú lo puedes cambiar con tu voto.
Tú tienes el arma más poderosa y lo sabes, demanda tu derecho a vivir mejor, no vendas tu libertad. Acepta los regalos y vota por una vida sin engaños, con honestidad.
El Salvador tendrá el gobierno que tú decidas.