Unas 700 personas entre hombres y mujeres de diferentes municipios de la zona oriente de El Salvador asistieron a la Jornada de Salud Visual que organizó la Asociación Salvadoreña Pro Salud Rural (ASAPROSAR), para consultar diferentes enfermedades relacionadas al ojo.
Rosa Ventura de 61 años de edad fue una de las beneficiadas por ASAPROSAR. Esta fue la segunda jornada en la que participó, pero esta vez llegó para actualizar sus exámenes de visión. María Martínez llegó de San Carlos, Morazán, a unas horas de San Miguel, acompañada de su hija. Martínez padece miopía y anteriormente le han practicado algunas cirugías.
Esta fue la campaña número 10 que se hace en San Miguel en alternancia con Santa Ana, y con el apoyo de la organización estadounidense “Amigos de ASAPROSAR”, que aglutina a profesionales de la salud que de manera voluntaria atienden a salvadoreños.
Durante cinco días, del 12 al 16 de marzo el personal nacional y extranjero recibió a unos 700 pacientes que llegaron a consultar diferentes patologías como esterigiones, miopías, glaucoma y cataratas entre otros. Siendo este último la principal causa de ceguera, dicen los médicos.
Don José Benjamín Sorto, de 87 años de edad, de Santa Rosa de Lima, en La Unión, llegó con su nieto. Sorto recibió una consulta para controlar sus problemas de glaucomas y cataratas. Los médicos decidieron dar seguimiento y le proporcionaron un diseño especial de lentes. “La campaña no termina aquí, estos esfuerzos se caracterizan porque les damos seguimiento en nuestra clínica a los casos que lo ameritan”, explica el gerente del Programa de Salud Visual de ASAPROSAR, Jorge Luna.
Los voluntarios han determinado, a partir de su experiencia, que en los últimos años en la zona oriental son los hombres más que las mujeres los más propenso a padecimientos del ojo ya que están expuestos al polvo por sus trabajos en el campo. Recomiendan a la población de oriente en general, el uso de lentes para protegerse del sol y la ingesta de agua suficiente para hidratar sus ojos, que se vuelve más necesario debido a las altas temperaturas.
En el marco de esta campaña, fueron homenajeados los esposos voluntarios estadounidenses Lorena y Robert Zeller, quienes han colaborado en jornadas de salud de manera consecutiva durante 28 años.