El proceso licitación pública para contratar el diseño y construcción del edificio que albergará el nuevo Hospital Nacional Rosales, fue anulado por el Ministerio de Obras Públicas (MOP) y será asumido por la Dirección Nacional de Obras Municipales (DOM).
De acuerdo al ministro de Salud, Francisco Alabí, la anulación de la licitación se debe “a la necesidad de revisar y reformular el proyecto, para que el mismo responda a los nuevos retos y a las necesidades de cobertura de salud de calidad” que incluiría modificaciones “en las especificaciones técnicas del proyecto”.
Así, el coejecutor del contrato de préstamo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) 3608/OC-ES sería la DOM.
La Dirección Nacional de Hospitales, es decir, unidad solicitante, reconoce que el Gobierno estableció “una estrategia de concentración de la ejecución de las obras más relevantes del municipio”, para lo que conformaron la DOM, de acuerdo al memorando 2022-6003-107 del 24 de enero de 2022,
Instancia gubernamental especializada para actualizar, modernizar y ajustar inversiones vitales y apremiantes, por lo cual ha decidido asignar la responsabilidad de la ejecución de un nuevo proceso de licitación, así como adjudicar y gestionar el contrato de esta obra”. Resolución del Ministerio de Salud.
El préstamo para el Programa Integrado de Salud II por $170 millones fue firmado el 7 de abril de 2016 y ratificado por la Asamblea Legislativa el 7 de junio de 2018. Tiene un plazo de ejecución de 5 años.
El 66 % del monto se estableció para fortalecimiento a la red hospitalaria, que incluye el nuevo edificio del Hospital Nacional Rosales y la construcción del hospital de la zona norte.
Esto corta el proceso de licitación que había comenzado hace casi un año, el 26 de febrero de 2021, el cual iniciaron 25 empresas interesadas y cuando seis de ellas habían llegado a la etapa final del proceso. El 16 de agosto de 2021, Salud recibió seis ofertas técnicas y financieras; de ellas, cuatro superaron la evaluación técnica para el 4 de noviembre pasado.
Todo parecía avanzar hasta ese momento. Incluso el ministro de Salud, Francisco Alabí, había dicho el 17 de septiembre de 2021 en conferencia de la prensa que las obras ya estaban “adjudicadas”, y que la primera fase hacia un nuevo Hospital Rosales costaría $50 millones y que la construcción culminaría en un rango de 25 a 30 meses. Sin embargo, no dio fecha para el inicio de las obras.
Dos meses después, el 15 de noviembre de 2021, se realizó la apertura de oferta de precio y hubo representación de cinco de las seis empresas oferentes finales. Parecía ya el final del proceso, todo en constante comunicación con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID), que avaló estos pasos, según los reportes colgados en el sitio web del Minsal.
Pero todo el proceso se frenó de repente en 2022 y entró una protagonista inesperada: la Dirección de Obras Municipales (DOM), entidad formada por la administración Bukele en noviembre 2021 y que se ha convertido en el brazo ejecutor del Gobierno a nivel municipal, una figura que ha sido criticada por restar independencia y poder de decisión a las propias alcaldías.
El 24 de enero de 2022, el Minsal informó en un memorándum que “la Dirección Nacional de Hospitales, en calidad de unidad solicitante, expone a la Unidad de Gestión de Programa, que el Gobierno Central ha establecido una estrategia de concentración de la ejecución de las Obras más relevantes del municipio y para eso ha conformado la Dirección de Obras Municipales, instancia gubernamental especializada para actualizar, modernizar y ajustar inversiones vitales y apremiantes, por lo cual ha decidido asignar la responsabilidad de la ejecución de un nuevo proceso de licitación, así como de adjudicar y gestionar el contrato de esta obra” del nuevo Hospital Rosales.
Este corte al proceso de licitación retrasará aún más esta obra, para la que el Gobierno solo había ejecutado $1.3 de los $80 millones del préstamo del BID para octubre de 2021, según confirmó a El Diario de Hoy la Oficina de Acceso a la Información Pública del Ministerio de Salud. Por ahora, entre los pocos avances está la demolición del antiguo Edificio de Maternidad, cuyo predio por ahora solo se ocupa como un parqueo de tierra.
Por otro lado, la DOM cuenta con recursos y mano de obra dirigida a obras municipales (canchas, parques, bacheo, muros de contención, etc.), y no para la construcción de obras como un centro médico de alta especialización, que debe contar con certificaciones técnicas precisas.
