viernes, 20 septiembre 2024
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La cosmogonía cromática nahua

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"En las antiguas sociedades nahuas, la cosmogonía cromática era importante y vital para el desarrollo de la sociedad": Carlos Imendia.

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Por Carlos F. Imendia.

Todas las civilizaciones y las culturas del mundo, a lo largo de su evolución e historia han encontrado en los colores una identidad, pertenencia, significado y simbolismo, basado primordialmente en los colores que representan los elementos naturales de nuestro planeta, En las culturas orientales como la antigua China, el rojo es asociado a la buena suerte, el blanco en el Japón es asociado a la muerte, en nuestras cultura, ya influenciada por el cristianismo europeo, también la liturgia cristiana se rige por colores, el blanco es asociado a la pureza, a la divinidad, al matrimonio, el negro a la maldad, a la brujería y al luto. Es espectro cromático tiene una experiencia sensorial en su inicio.

Para cada individuo  dependerá la experiencia sensorial  con un color determinado, en mi caso personal el color azul siempre ha simbolizado mis anhelos porque para mí el azul es un color profundo y es una carretera a la inmensidad. Dentro de la gama cromática,  los valores humanos pueden asociarse a conceptos y hasta estados de ánimo. Los publicistas entienden mejor eso en la denominada psicología del color que adecuan a sus piezas publicitarias, el rojo está vinculado a estimular el apetito, al igual que el amarillo, que se asocia a la felicidad, el verde es símbolo del medio ambiente y la naturaleza;  el negro al poder y prestigio.

En las antiguas sociedades nahuas, la cosmogonía cromática era importante y vital para el desarrollo de la sociedad y de sus actos religiosos. Uno de los colores más predominantes era el rojo o chichiltic (en Náhuatl) los antiguos mexicas obtenían este tinte de la cochinilla o gusano del nopal llamado Nocheztli. También en gran parte de Mesoamérica se usaba el achiote para obtener este pigmento. El rojo para Toltecas y mayas representaba el rumbo norte, para los nahuas el Este, donde nace el sol.  También se asocia al culto y las tonalidades que en el día adquiere el astro rey, entre esas deidades están: Tezcatlipoca, Huitzilopochtli, Tonatiuh, Xochipilli, MacuilXochilt y Chicomeoatl.

Volviendo al color azul (mi favorito) los antiguos mayas pudieron proveer de la técnica de extracción de este preciado tinte a un vegetal oriundo de estas tierras mesoamericanas, el jiquilete. El añil o la tinta como se le conocido  en el periodo colonial, era parte de la técnica que los mayas pintaban preciosos murales de azul profundo, tan coloridos que no tienen nada que envidiarle a las catedrales italianas del Renacimiento, un ejemplo es el caso de Bonampak en el estado de Chiapas México, conocido como la capilla  Sixtina del mundo maya, los murales en su interior son impresionantes.

Así  eran las raíces náhuatl de la base primaria cromática: Blanco; Istac, del algodón cosechado, el color de Quetzalcóatl, humo y ceniza, Amarillo; Coztic, excremento amarillo u  oro (Lo que buscaban los españoles), Rojo; chichiltic, asociado a las deidades solares, el papagayo, guacamaya roja. Verde, asociado a la belleza (quetzalli), al quetzal, al jade o chalchihuitz.

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Carlos F. Imendia
Carlos F. Imendia
Comunicador, publicista y mercadólogo salvadoreño; columnista y colaborador de ContraPunto

El contenido de este artículo no refleja necesariamente la postura de ContraPunto. Es la opinión exclusiva de su autor.

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