Criterios de la USAC para conmemorar los 200 años de la Independencia
La ola independentista latinoamericana (1810-1830) se inspiró en las ideas de la Ilustración; fue posible por la invasión napoleónica a la Península Ibérica (que causó un vacío de poder en las colonias), se vio azuzada por el gobierno inglés y sus bancos (para endeudar a los nacientes países americanos) y se la empezó a tragar la Doctrina Monroe desde 1823. Las élites criollas independizaron sus tierras, inventaron fronteras nacionales según los linderos de sus fincas y, libres ya de los impuestos de su madre patria, instauraron economías feudales que, con fachada de Estados democráticos y republicanos, se expresaron en imaginarios nacionales repletos de valores iluministas e ideas castrenses (como en los himnos y banderas nacionales). Esta cruenta fábula se erigió sobre las espaldas de indios, mestizos, negros, mulatos, zambos y otros sujetos subalternos creados por el colonialismo, sobre quienes recayó la servidumbre de la tierra.
El proyecto político independentista fue, pues, exclusivamente criollo. No indio ni mestizo. En los países en los que hubo guerras de Independencia, los dirigentes criollos usaron a negros, mestizos e indios como carne de cañón. Y con la digna excepción de Bolívar, quien vio en la Independencia la oportunidad de fundar un gran país ―del Bravo a la Patagonia― para competir entre iguales con Estados Unidos, todas las élites criollas que impulsaron la Independencia (salvo pocos individuos) lo hicieron para fundar feudos en los que explotar a las mayorías “de color” que produjo el inevitable eurocentrismo político, ideológico y religioso de la colonización.
Si la libertad que el independentismo pregona es una libertad circunscrita a las élites criollas, ¿cómo fue que llegamos a creer que todos nos liberamos de la dominación el 15 de septiembre de 1821? Y, ante estos hechos, ¿cómo y según qué parámetros la Universidad de San Carlos de Guatemala conmemorará (no celebrará) en el 2021 el Bicentenario de la Independencia de Guatemala y Centroamérica? Estas y otras interrogantes dieron lugar a la necesidad de establecer los criterios con los que la Comisión Bicentenario de la USAC organizará la conmemoración de la efeméride independentista, la cual, ha anunciado, revestirá un carácter científico, crítico y propositivo, tanto respecto del pasado como del futuro de nuestro país.
Para hablar de esto, la Comisión Bicentenario invita a la comunidad universitaria y a la ciudadanía en general a su primera actividad académica, consistente en la mesa redonda “Criterios universitarios para conmemorar el Bicentenario de la Independencia de Guatemala”, a realizarse en el Auditorio de la Escuela de Ciencias de la Comunicación (Edificio M-2, campus central), el jueves 31 de octubre a las 10 de la mañana. La entrada es libre.