El director de la Policía Nacional Civil, Howard Cotto, informó esta mañana que la Organización Internacional de Policía Criminal (INTERPOL), rechazó nuevamente la petición de emitir la difusión roja en contra del expresidente Mauricio Funes.
Según explicó el director de la corporación policial, la orden fue desestimada porque se centra en la localización del sospechoso, lo que no aplica en el caso del exmandatario, ya que se tiene conocimiento oficial de que se encuentra bajo asilo en Nicaragua junto a su familia.
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“La semana pasada, el Comité Jurídico volvió a negar la emisión de difusión roja para Mauricio Funes. La difusión roja es una orden para localización de personas prófugas, en el caso de él no opera la localización, quizás esa fue la valoración del Comité porque él está localizado, está en Nicaragua”, aseguró Cotto durante la entrevista del programa “A Primera Hora” de Radio 102nueve.
Además, el funcionario enfatizó que la entidad internacional también toma en consideración los reportes de las autoridades nicaragí¼enses, cuyo contenido es desconocido.
“El Comité no sólo valoró el informe emitido por las autoridades salvadoreñas, sino que por ser miembro también de la Interpol, la policía de Nicaragua, debió haber pedido informe de ese caso. Pero hasta hoy la valoración del Comité es no emitir la difusión roja”, detalló Cotto.
A la fecha, la Fiscalía General de la República (FGR) ha emitido cuatro órdenes de captura en contra del exmandatario, la última de ellas se emitió el pasado 30 de enero en relación al caso El Chaparral e incluye a su actual pareja, Ada Mitchell Guzmán.
Entre los señalados por el Ministerio Público por el caso Chaparral, también encuentra el expresidente de la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL), José Leopoldo Samour Gómez, y dos representantes de la empresa constructora Astaldi, José Efraín Quinteros y Mario Pieragostini. De quienes hasta el momento se desconoce si girarán ordenes de captura.
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De acuerdo con la Fiscalía, en junio de 2012, los involucrados negociaron un contrato con la empresa constructora Astaldi con el propósito de anularlo y desviar entre ellos un monto de $108 millones 500 mil dólares, más los $45,244,418 millones con los que favorecieron a la empresa .
Las indagaciones entorno a este caso fueron bloqueadas durante años, debido a que el mismo Funes pagó sobresueldos de $10,000 y $15,000 a Martínez a cambio de bloquear los procesos.
