El Viceministro de Seguridad y director de Centros Penales, Osiris Luna, no dejó de sentirse satisfecho por los resultados que se están obteniendo con la administración del presidente Nayib Bukele en materia de seguridad pública.
Para el funcionario, se ha logrado percibir a escala internacional incluso, una perspectiva diferente a la que se tenía con gobiernos anteriores en donde la imagen era que El Salvador es uno de los más violentos del mundo.
“Qué positivo que, con nuestro mayor aliado Estados Unidos en donde hay más de tres millones de salvadoreños, hoy tengamos, una de las mejores relaciones a nivel de Estado que se habían roto en los últimos diez años”, precisó.
Y es que para Luna, los compromisos suscritos el domingo entre el presidente Bukele y el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo en temas como la inmigración ilegal, la lucha contra las pandillas y el narcotráfico, así como la extensión del funcionamiento del Centro de Monitoreo Antidrogas en Comalapa, demuestra que se están haciendo bien las cosas.
El Plan de Control Territorial lanzado por el Ejecutivo el 20 de junio, es una clara demostración que se ha tomado muy en serio solucionar el problema de la delincuencia y la criminalidad.
Recordó que esta iniciativa en su fase uno, ha logrado uno de los principales objetivos como es el de atacar las finanzas de los grupos criminales, sacar a los pandilleros de las zonas que estaban bajo su dominio y mantener un control estricto en los centros penitenciarios.
Explicó que ya no van a existir los municipios santuarios, hoy el Estado tendrá el control territorial.
También consideró que han tenido números muy diferentes en desplazamientos forzados y esto quiere decir que disminuirá la migración paulatinamente.
Un estudio de opinión elaborado recientemente, sobre el Desplazamiento Forzado por la Violencia y las Medidas Extraordinarias elaboradas por el Instituto de Opinión Pública (IUDOP), en conjunto con CRISTOSAL, señala que la cifra ronda 235 mil 700 víctimas aproximadamente en el 2018.
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Agregó que el pasado jueves, se levantó el estado de emergencia en los penales , no obstante, eso no significa que los reos puedan recibir visitas, lo único que se ha suspendido es la medida de encierro.
Comentó que en lo referente al sistema penitenciario, tiene un antes y un después con la llegada del nuevo Gobierno; y encontraron una serie de irregularidades, a tal punto que eran las mafias las que controlaban los penales en complicidad con las mismas autoridades.
Y mencionó el caso de ASOCAMBIO, una ONG creada y administrada por el exministro de Seguridad, Mauricio Ramírez Landaverde; el exviceministro Raúl Antonio López y el exdirector de Centros Penales, Marco Tulio Lima. Ellos se encargaban de administrar el dinero que generaban las tiendas en los centros penitenciarios y que dejaban unos $14 millones al año.
“Ahorita no hemos tocado ese dinero de ASOCAMBIO, en virtud de que hay una investigación abierta por parte de la Fiscalía General de la República”, aclaró Luna.
Lamentó que encontraron la maquinaria de panadería y molinos empaquetadas sin darle ningún uso, hasta sistema de cabinas telefónicas tenían los privados de libertad, “con indicios de corrupción, un sistema penitenciario que no daba garantías de rehabilitación”.
El director de Centros Penales fue enfático en decir que están quitando a todas las mafias que controlaban las cárceles y los están enviando a centros de máxima seguridad.
Por último informó que técnicos de la Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (SIGET), se están encargando de bloquear las señales en los penales, para que los internos no puedan tener comunicación con sus estructuras delincuenciales.
“Al no salir ninguna orden de los centros penitenciarios, se rompe la estructura que tenían los grupos delincuenciales”, puntualizó Luna.
