Se estima que alrededor de 15 mil hondureños trabajan en la industria manufacturera de ropa interior para distintas marcas de ropa interior femenina. El rédito anual de exportación asciende a $300 millones de dólares solo para este producto, según el empresario de la maquila y coordinador del Programa Nacional de Desarrollo Económico Honduras 20/20, Jesús Canahuati.
Según el empresario, la profesionalización del personal maquilero ha permitido a la industria costurera del país centroamericano convertirse en una de las favoritas en el mercado anglosajón, que actualmente es el quinto país fabricante más importante en Estados Unidos.
“Honduras tiene mucha tradición en la fabricación de ropa íntima. Siempre hemos sido de los primeros fabricantes de brasieres y todo tipo de ropa interior. Desde finales de la década de los ochenta nos posicionamos como un gran fabricante y exportador de este tipo de prendas. En 1989 ya elaborábamos alrededor de 1.2 millones de docenas de brasieres y underwear (ropa interior), generando más de $22 millones de dólares por los envíos realizados, detalló Canahuati.
Los principales destinos de las prendas fabricadas en Honduras son los Estados Unidos y Canadá. Sin embargo, también se distribuyen por Centroamérica.
Sobre los planes de expansión, Canahuati dijo que “los empresarios de la maquila siempre estamos pensando en incursionar en nuevos mercados. Por ahora, el reto es crecer en Canadá y aprovechar las ventas que nos ofrecen los tratados de libre comercio que Honduras ha firmado con diferentes países y bloques comerciales”.
Por su parte, el titular de la Secretaría de Desarrollo Económico de Honduras (SDE), Arnaldo Castillo, aseguró que buscan incrementar la apuesta a dicha industria. “Ya registramos la apertura de nuevas plantas, una en los rubros que ya teníamos y otras diversificando el abanico de producción”, dijo.
Autoridades del gobierno hondureño y empresarios textiles esperan que para 2020 el rubro textil genere a su país alrededor de 200 mil empleos.