El secretario de Transparencia de la Presidencia, Marcos Rodríguez, desmintió este lunes que el presidente Salvador Sánchez Cerén haga uso irregular del presupuesto de gastos reservados de la Presidencia, tal y como lo publicó recientemente el periódico digital El Faro.
De acuerdo con la publicación de dicho medio, Sánchez Cerén habría copiado el mecanismo de su antecesor, el expresidente Mauricio Funes, para gastar $147.9 millones de dólares de la partida secreta. Funes, al igual que su antecesor, Elías Antonio Saca, son acusados de la malversación millonaria de este presupuesto privado.
Según el reportaje de El Faro, hasta julio pasado, el segundo gobierno del FMLN reporta, según estados de ejecución presupuestaria, $147.96 millones en fondos públicos canalizados hacia esta partida. Estos fondos equivalen a una cuarta parte del presupuesto total con el que ha trabajado Casa Presidencial durante cuatro años del período de Sánchez Cerén y a solo uno de que concluya su período.
“Sánchez Cerén copió estos últimos dos mecanismo que usó Funes. El primero consiste en hacer recortes internos del presupuesto de Presidencia y ubicar ese dinero en los gastos reservados, lejos del escrutinio público”, explica El Faro.
No obstante, Marcos Rodríguez afirma que la partida secreta de gastos reservados no debe rendir cuentas al público.
“Cuando hay una partida reservada no se le rinde cuentas al público, sino a alguna entidad que lo representa y vela por el buen uso de los recursos públicos. No todo recurso del Estado es auditable públicamente, ahí se equivoca El Faro en su reportaje”, dijo Rodríguez en la entrevista matutina de canal 10.
El Faro expresa también que Sánchez Cerén reorientó más de $40 millones hacia esta partida entre el 1 junio de 2014 y el 30 de junio de 2018. El segundo mecanismo que usó fue desviar fondos de préstamos hacia los gastos reservados. De los $40 millones en recortes internos de Presidencia, por ejemplo, había $1.5 millones que llegaron a Presidencia gracias a un préstamo entregado por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Sin embargo, Marcos Rodríguez enfatiza que los traslados o reorientaciones de dinero a esa partida, no son antojadizas de la Presidencia.
“La Sala de lo Constitucional ha determinado que la única entidad que puede trasladar fondos de una entidad del Estado a otra es la Asamblea Legislativa, nadie lo puede hacer por su propia cuenta, así sea el Presidente”, subrayó Rodríguez.
Marcos Rodríguez cuestionó además la falta de fiscalización de la partida secreta que manejó el expresidente Francisco Flores.
“Nadie ha abierto los $144 millones de la partida reservada del gobierno de Flores y eso que Saca, en el inicio de su declaración, dijo que Flores le pasó un manual de cómo funcionaba e incluso el personal”, señaló Rodríguez.
Por malversar esta partida secreta, Saca guarda prisión y ha confesado haber malversado $301 millones de dólares, mientras que el expresidente Funes tiene orden de captura y es investigado por presuntamente desfalcar $351 millones de dólares. Actualmente es refugiado político de Nicaragua.