El viceministro de Transporte, Nelson García, dijo este jueves que la medida cautelar que manda utilizar públicamente el carril segregado del SITRAMSS estanca las obras de modernización al transporte público del país y pone al Gobierno en riesgo de ser demandado por la empresa operadora de transporte.
“Esta decisión afecta a más de 145 mil personas que utilizan el SITRAMSS, pero no solo eso, también estanca los proyectos que estábamos a punto de ejecutar para mejorar el sistema. Además los magistrados han puesto en riesgo al Gobierno de ser demandado”, explicó García.
El pasado 8 de mayo, los magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia (CSJ), estableció medida cautelar para que a partir de este 11 de mayo los carriles del SITRAMSS puedan ser utilizados sin restricciones en el desplazamiento vehicular por la población.
Esta medida ha generado descontentos por parte de ciudadanos, Gobierno y empresa privada, pues aseguran que la medida, además de prolongar el tiempo del usuario para trasladarse, atenta contra la seguridad del ciudadano.
“Este tipo de transporte ha permitido que el ciudadano viaje con rapidez, con seguridad y con control de la operación que se realiza a través de una unidad especializada, ahora esto se vuelve inútil porque ahora el carril se vuelve mixto. Se ha desnaturalizado el concepto de estos tipos de transporte”, sostuvo el viceministro.
El funcionario afirmó que el Gobierno seguirá apostándole a la modernización del transporte y continuará defendiendo el proyecto.
“Por ello el presidente de la República presentó un recurso de revocatoria para que se estudie la nulidad de todo el proceso y se deroga la medida, pues prácticamente tiene indicios de ser una resolución definitiva”, explicó.
Además el viceministro señaló que sostendrán este jueves una reunión con representantes de la empresa administradora del SITRAMSS para medir los impactos de la medida cautelar.