El martes 28 de enero se comenzó a pagar $100.00 a los excombatientes del FMLN y veteranos de la FAES. Cuando se hizo la promesa desde el gobierno, y cuando la Asamblea Legislativa aprobó el decreto transitorio que faculta el pago de la mencionada cantidad, se generó una efervescencia de alegría entre los beneficiarios del sector. ¡Y con razón! Sin embargo, el presupuesto destinado para tal fin no es suficiente lo que significa que no todos los veteranos serían beneficiados con esta decisión. Y aquí debemos prestar atención a que una cosa es la promesa, y otra la realidad presupuestaria. En este contexto no debemos olvidar que la Junta Directiva del Instituto tiene facultades administrativas: administramos los recursos que el Gobierno destina para el sector.
También está el sector de lisiados de guerra del FMLN y de la FAES, que si bien es cierto recibe una pensión, igualmente tiene derecho a la pensión que se otorga como parte del programa de veteranos y excombatientes. Y la ley de beneficios a los veteranos y excombatientes no define jurídicamente que no se pueda pagar la doble pensión sino que deja abierto el tema a la interpretación flexible de los interesados.
Como Junta Directiva del Instituto hemos analizado el tema, y hemos enviado oficios a instancias del Gobierno donde solicitamos se nos dé un dictamen apegado a las leyes si procede o no pagar la doble pensión. Pero si jurídicamente fuera posible, en la realidad no se podría corresponder este derecho ya que no se ha destinado presupuesto para ello.
Y aquí mencionar que como lisiados de guerra hemos presentado, a la Honorable Asamblea Legislativa, una propuesta de reformas al DL 416, donde aparte de proponer reformar 12 artículos para armonizar la legislación salvadoreña con la de la ONU, proponemos reformar 19 artículos relacionados a la parte administrativa del FOPROLYD, y 4 que son las reivindicaciones del sector de lisiados de guerra: (1) atención integral en salud, (2) aumento del 20 % de la pensión si no hubiera aumento al salario mínimo durante 3 años consecutivos, (3) que el bono navideño sea parte del DL 416, y (4) la incorporación a los beneficios de FOPROLYD a las madres y padres de caídos durante la guerra civil.
Y es que, los lisiados de guerra del FMLN y de la FAES, somos veteranos y excombatientes de acuerdo a la definición que hace la ley. Por lo tanto, nos asiste el derecho a la doble pensión.
Luego están los beneficios como el programa de becas, el programa de salud, el programa de apoyo a la vivienda, el programa de tierras, y proyectos productivos para los cuales aún no se ha asignado un presupuesto que nos permita enfrentar, satisfactoriamente, las necesidades del sector de veteranos y excombatientes.
Finalmente mencionar que los honorables diputados no han puesto sus buenos oficios para reformar la ley para que los excombatientes del FMLN, muchos de ellos con carnet de desmovilizados extendidos por la ONUSAL, puedan ingresar al registro de veteranos y excombatientes ya que a “alguien” se le ocurrió cerrar el censo de los gloriosos guerrilleros/as y solamente dejar abierto el de los veteranos de la FAES.
(*) MSc Darío Sánchez, del Instituto de Veteranos y Excombatientes