Luego de haber sufrido su peor derrota, en las elecciones presidenciales del 3 de febrero de 2019 (después del fracaso en los comicios intermedios para diputados y alcaldes), el FMLN cayó en la que diversos analistas han catalogado como “la peor crisis” de su historia política. No sólo pasaron a ser la tercera fuerza, sino que además vieron coronarse en el Ejecutivo a un disidente de sus filas y al que veían como su archienemigo : Nayib Bukele.
En ese escenario, el partido efemelenista tenía que tomar una decisión entre renovarse o seguir el camino al precipicio. Decidió lo primero y, tan sólo tres días después de los comicios presidenciales, la Comisión Política decidió dar un paso al costado y convocar a elecciones para elegir a una nueva dirigencia. Esas elecciones se llevarán a cabo este 16 de junio. Mientras tanto, los líderes del partido hicieron un llamado a otros veteranos del partido y a funcionarios del Gobierno que no se presentaran a las internas.
Sin embargo, la orden no fue acatada por Óscar Ortiz, exvicepresidente de la República, ni por Arístides Valencia, exministro de Gobernación; ambos, durante la gestión de Salvador Sánchez Cerén (2014-2019). Ahora, Valencia y Ortiz son los dos principales contendientes que aspiran a la Secretaría General del partido.
En la contienda también participan la exconcejala del sector juventud, Cledys Molina y Vladimir Rodríguez. Sin embargo, Lorena Peña, miembro de la actual Comisión Política del partido y símbolo de la vieja guardia guerrillera que dio origen a esta fuerza política, tiene claro que Valencia y Ortiz son las dos puntas de lanzas que chocarán este 16 de junio.
“Entre ellos dos creo que está la definición. Cualquiera que sea el resultado, vamos a acatarlo. Los dos han sido funcionarios públicos. (Ortíz) es muy mediático. Creo que a los dos les da ventajas y desventajas haber estado en cargos públicos. Arístides ha estado muy en contacto con los departamentos”, comentó Peña, durante la entrevista con la Radio Fuego.
Pese a este escenario, Molina se ha plantado firme en su clamor por un cambio, pues considera que las opciones Valencia-Ortiz están “viciadas”. Por ello, los considera incapaces de recuperar a un partido que está “en coma”.
“Para mí, (el FMLN) es un paciente que está en cuidados intensivos. Que necesita trasplante de órganos vitales y una transfusión de sangre limpia”, dijo Molina durante una entrevista con El Faro. “Las otras opciones están viciadas y contaminadas. Nada cambiará si seguimos haciendo las mismas cosas. Los dos candidatos fuertes han estado en la dirección del partido, tienen características similares. No habrá nuevos procesos, ni la oportunidad de volver a tener credibilidad en la militancia y en el pueblo”, lamentó Molina
Durante una entrevista con Radio Mayavisión, el candidato Vladimir Rodríguez señaló que es importante “volver a las bases” y se comprometió a trabajar de cerca con ellos. Criticó que los militantes ya no quieren ver a sus líderes con carros de lujo y altos salarios, sino, tenerlos cerca para trabajar en el terreno. Estar “bañados en pueblo”, insistió Rodríguez en la entrevista.
Figuras recicladas
Para el firmante de los Acuerdos de Paz y analista político, Roberto Cañas, las internas del FMLN constituyen una especie de “crónica hacia la debacle terminal”, cuyos actores principales serán Valencia y Ortiz.
“Para todos los efectos, lo que vamos a encontrar es la crónica de un partido que está en una debacle terminal, que nadie se imaginaba ni siquiera después del 3F (fecha de las elecciones que pasaron)”, aseveró Cañas con contundencia. También resaltó que el exvicepresidente “ya dio todo lo que pudo dar los 10 años anteriores” y calificó el liderazgo de Valencia como “opaco”.
De igual manera, Cañas afirmó que el principal reto que tendrá que enfrentar el futuro secretario general será “recoger los pedazos del FMLN”.
“Tienen que recoger los pedazos del FMLN. Empezar a reconstruir un partido que no es lo que era. Este no es el FMLN que firmó los Acuerdos de Paz, que desarrolló una brillante lucha político-militar-diplomática. Es recoger los pedazos de un FMLN muy golpeado”, sentenció Cañas.
De cara a las elecciones, Valencia se ha comprometido a recuperar el “carácter revolucionario” del FMLN para defender los derechos del pueblo.
“En primer lugar, el FMLN deberá fortalecer su proyecto revolucionario, y además, construir las alianzas necesarias para defender los logros y derechos del pueblo, teniendo claro que es necesario aglutinar todas las fuerzas del país que rechazan el proyecto neoliberal”, precisó Valencia para el Diario CoLatino.
En cambio, Ortiz, que durante su campaña ha denunciado una serie de irregularidades que afectaron a su candidatura, ha prometido que buscará convertir nuevamente al FMLN en el corazón del debate de izquierda.
“Estamos en un proceso interno para tratar de reaccionar a esta coyuntura y momento histórico que estamos viviendo. Mi prioridad es levantar al Frente, relanzar este proyecto fuerte, integrado, inclusivo y cada vez más fresco. La izquierda siempre será necesaria. Estoy convencido que el Frente puede seguir siendo la fuerza que se convierta en ese corazón de ese gran proyecto de izquierda para los próximos años”, expresó Ortiz.
El padrón electoral actual del FMLN ronda los 40,000 miembros, los cuales han sido convocados para asistir a las urnas este próximo domingo en los 14 departamentos del país a partir de las 8:00 de la mañana.