Un grupo de sacerdotes ortodoxos de la región rusa de Tver Oblast han recorrido desde el cielo, la ciudad para rociarla con agua bendita y limpiarla de pecados y vicios como la bebida o el sexo.
Los religiosos Savva y Kashinsky, el padre Alexander Goryachev y otros miembros de la Iglesia Ortodoxa Rusa fueron los encargados de realizar esta extraña bendición de la ciudad, que tuvo lugar, coincidiendo con el Día de la Sobriedad del país.
Subieron a un pequeño avión, que cargaron con 70 litros de agua bendita y dos iconos religiosos: “el Cáliz inagotable”, que se dice que puede curar a las personas de la adicción al alcohol y las drogas; y otro de Juan el Bautista.
Después del despegue, desde un campo de aviación cercano a la ciudad de Tver, los clérigos se ataron los arneses de seguridad, abrieron la puerta del avión y oraron antes de verter el agua bendita sobre la ciudad. “Cualquier enfermedad proviene de un virus y un virus es un demonio. Por lo tanto, cualquier enfermedad es principalmente una enfermedad espiritual”, afirmó el padre Alexander a Tver News.
Ante algunas reacciones, que se han tomado esta acción como una broma, el religioso comentó: "¿Cuál es el chiste? ¿Qué estamos tratando de ayudar a las personas a deshacerse de las enfermedades? Promovemos detener el consumo de alcohol, las drogas y la fornicación, ¿es esto ridículo?.