Un grupo de migrantes amparados bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) podrán aspirar a obtener la residencia o green card, con lo que fortalecerían la legalidad de su situación en Estados Unidos.
Un grupo de migrantes amparados bajo el Estatus de Protección Temporal (TPS, por sus siglas en inglés) podrán aspirar a obtener la residencia o green card, con lo que fortalecerían la legalidad de su situación en Estados Unidos.
La Junta de Apelaciones e Inmigración (BIA) resolvió a favor de un dictamen de 2017, que promueve un ajuste en el estatus legal según la Ley de Inmigración y Nacionalidad. Los que ahora están en situación de protección temporal tienen la posiblidad de convertirse en residentes permanentes, siempre y cuando cumplan los requisitos y completen el proceso.
Así, la junta estableció que para poder acceder a esta oportunidad de legalizarse en el largo plazo, los migrantes interesados deben cumplir con los siguientes requisitos: primero, tener un cónyuge estadounidense o hijos estadounidenses mayores de edad (más de 21 años); segundo, vivir enlos sitios en los que tiene jurisdicción la corte de apelaciones del sexto y del noveno distrito. De acuerdo a lo que publicó Univisión, se reparten así: el noveno cubre Alaska, Hawai, Guam, California, Oregon, Washington, Montana, Idaho, Nevada, Arizona y las Islas Marianas del Norte. Alaska, Hawai, Guam, California, Oregon, Washington, Montana, Idaho, Nevada, Arizona y las Islas Marianas del Norte. El sexto cubre Missouri, Wisconsin, Indiana, Illinois, Kentucky y Tennessee.
Citado por Univisión, el abogado Álex Galvez detalló que incluso es posible que los interesados en dar este paso se puedan mover hacia uno de esos estados, para ser beneficiados. Nada más hay que tomar en cuenta que en cada una de estas ciudades hay requisitos diferentes para sostener que se ha estado viviendo ahí el tiempo necesario.
De esta manera, la resolución es como un triunfo para los procesos que habían iniciado desde que el salvadoreño Jesús Ramírez argumentó, ante las autoridades judiciales, que haber recibido el TPS en 2001 era una manera en que el Gobierno estadounidense admitía su ingreso al territorio como legal. En este punto es importante recordar que ingresar a la nación por una vía legal es indispensable para poder aspirar a la residencia permanente.
En enero de 2020 termina la protección del TPS para un estimado de 170,000 salvadoreños. Después de esa fecha, pasan a ser inmigrantes sin un estatus legal. No significa que todos vendrán deportados de una vez, pero su situación se complica y deben resolverla cuanto antes. Otra opción es que los congresistas aprueben una ley que los cubra a todos, incluso a beneficiarios de TPS de otras nacionalidades. Esta última posibilidad puede enfrentar otros obstáculos, porque los estadounidenses ya están en campaña presidencial y el tema de migración es una de las principales banderas que ondean los aspirantes a competir en la elección.