Agencia de noticias Sputnik
El Gobierno de Colombia afirmó este jueves que la reciente expatriación de opositores en Nicaragua recuerda los peores momentos de la dictadura de los Somoza en esa nación centroamericana (1937-1979) y reclamó una reacción de la comunidad internacional.
“Colombia, que en las últimas décadas ha luchado sin desmayo por alcanzar la paz, mucho más ahora que se propone ser potencia mundial de la vida, rechaza los dictatoriales procederes de quien hace traer a la memoria los peores momentos de la dictadura de Atanasio Somoza que el sandinismo logró superar”, afirma la Cancillería en una nota.
El texto señala que el Gobierno del presidente Gustavo Petro registró “con repulsión” las medidas tomadas “de manera arbitraria” contra ciudadanos nicaragüenses “cuyo único delito ha sido defender la democracia, el derecho a la crítica y los derechos humanos universales”.
La administración del presidente Daniel Ortega argumenta que los expatriados perdieron su derecho de ciudadanía por “menoscabo a la independencia, soberanía y la autodeterminación del pueblo”, e insistió en que la medida fue soberana, avalada por las leyes de Nicaragua y por el respaldo popular.
En su comunicado, el Gobierno colombiano pidió al Comité Internacional de la Cruz Roja que solicite autorización para visitar a quienes guarden prisión en Nicaragua por motivos políticos, y alertó a la Corte Penal Internacional sobre supuestas violaciones del derecho internacional general.
Entre los críticos de la gestión de Ortega que perdieron sus derechos ciudadanos destacan los escritores Sergio Ramírez, Gioconda Belli y Sofía Montenegro, así como el obispo Silvio Báez, el periodista Carlos Fernando Chamorro y la presidenta del Centro Nicaragüense de Derechos Humanos, Vilma Núñez.
