Nayib Bukele pasó de ser alcalde de Nuevo Cuscatlán a edil de San Salvador en 2015. Fue un cambio que arrastró consigo un atípico juego de dimes y diretes contra el FMLN, partido que lo llevó a la vida política y que ha tenido que salir al paso de sus señalamientos para evitar generar una percepción de división interna entre la línea ortodoxa y “las nuevas ideas” de Bukele.
No obstante, el FMLN niega que haya alguna fisura entre ambas partes. “Lo más importante es lo que la población piensa de lo que están haciendo los funcionarios. Es evidente el respaldo que tiene la gestión de Bukele. Nosotros lo respaldamos, es nuestro alcalde, ganó con nuestra bandera y no hay fisuras ni división interna al respecto”, dijo Margarita Rodríguez, diputada efemelenista.
Pero la historia reciente contrasta con lo dicho por los parlamentarios. A finales de 2014, Bukele cuestionó algunas decisiones de su partido como el respaldo que dio a Sigfrido Reyes, expresidente de la Asamblea Legislativa, en medio de señalamientos periodísticos en su contra sobre presuntas compraventas irregulares de terrenos valiéndose de su cargo.
En diciembre de 2015, advirtió al FMLN que si votaba a favor de la reelección del exfiscal general, Luis Martínez, renunciaría al partido.
El diputado del FMLN, Rolando Mata, insiste en que el debate es normal dentro de su partido y afirma que hay quienes “quieren hacer parecer mediáticamente como que tenemos el mismo problema que está teniendo ARENA que se están aruñando como gatos en cualquiera de los temas”.
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Sin embargo, en marzo de 2016, el edil capitalino criticó desde sus redes sociales, la pasividad con la que el gobierno trataba en ese momento el combate a la violencia.
En septiembre de ese mismo año, Bukele criticó en su cuenta de Twitter el impuesto a la telefonía. “¿Otro impuesto para el pueblo, con tantos evasores y corruptos? ¿De lado de quien estamos? ¡Esto no tiene sentido!”, escribió.
Ese mismo mes expresó sentirse engañado por el gobierno y criticó la reducción del subsidio al gas y a la energía eléctrica a más de 140 mil personas. “Yo estoy seguro que si Shafik Hándal estuviera vivo, me estuviera dando la razón”, desafió.
En noviembre de 2016, Medardo González, secretario general del FMLN, sugirió en una entrevista televisiva que el partido no contempla, por el momento, una eventual candidatura presidencial de Bukele. “Es un muy buen compañero que nosotros consideramos y yo personalmente considero que Nayib es un buen candidato para la Alcaldía de San Salvador”, subrayó González.
A principios de marzo de este año, Bukele criticó la gestión de la Secretaría de Cultura de la Presidencia (Secultura) por la muerte del hipopótamo del Zoológico Nacional, “Gustavito”. Posteriormente, la entidad intentó frenar la remodelación del Centro Histórico de San Salvador y Bukele reaccionó con una amenaza de demanda de $14 millones de dólares si eso pasaba. Al final la remodelación siguió su marcha.
Y de nuevo, este lunes el periódico digital El Faro publicó una entrevista con Bukele, en la que expresa que el FMLN ha “serruchado su piso” pero sin dejarlo caer. En la entrevista señala que el partido intentó tener “ojos y oídos” dentro de la Alcaldía, pero que dichas personas fueron despedidas por el Consejo municipal, pues no respondían a la institución sino a un partido político.
“Las estructuras tradicionales de los partidos no entienden que la política ya cambió (“¦) Yo siento que el FMLN a mí me ve como alguien que le suma mucho, pero con miedo a que le sume demasiado”, expresa en la entrevista.
El edil recalca que ve imposible su candidatura presidencial y buscarla significaría pagar un alto costo. “Tienes que vender mucho para llegar ahí. O sea, tienes que mover mucho la cola, tienes que vender mucho tus principios, aceptar muchas cosas que no aceptarías”.
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Aseguró que los impases con su partido se han resuelto y debe ser este mes que decida si buscar o no la reelección a la comuna capitalina porque se acercan las elecciones internas.
El partido lo respalda según sus diputados y apoyarían cualquier decisión del político más popular con el que cuentan, el joven que los tiene entre la división y la fuerza.
