A través de su cuenta de Twitter, el presidente de la República, Nayib Bukele, aclaró la polémica que se ha desatado por la solicitud de reorientación de $21.1 millones provenientes del Sistema de Pensiones para proyectos de Seguridad.
El mandatario explicó que los fondos que solicita corresponden al dinero de sobrante de impuestos y no de ahorro de pensiones.
“Fue un cálculo erróneo hecho por el Gobierno anterior, dejando un sobrante de impuestos cobrados de 21.1 millones de dólares. Este dinero se perderá, si en dado caso no se reforma el presupuesto del 2019”, puntualizó.
A esto agregó que: “Lo que el Gobierno informó a la Asamblea Legislativa, fue que lo que el gobierno presupuestó para el pago de pensiones (dinero de los impuestos y no de los ahorros) para este año, sobraron 21.1 millones de dólares, que corresponde a un sobre calculo en la cantidad de gente que se iba a jubilar este año”.
En este sentido, reclamó que la seguridad es lo más urgente en estos momentos, por lo que está dispuesto a que se utilice en medicamentos o algo que también se requiera para los salvadoreños.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Nelson Fuentes, llegó a la Asamblea Legislativa para explicar de manera técnica lo que estaban solicitando.
Ante esta situación, dijo que el presupuesto existe una asignación de gastos “presupuesta” por la Superintendencia del Sistema Financiero (SSF), BANDESAL y la administradora de fondos de pensiones que establece que en el ejercicio fiscal 2019 se iban a destinar $246 millones para pagar los intereses del Fideicomiso de Obligaciones Previsionales. Estos pagos se hacen trimestralmente; y el último fue en octubre. Al cierre de los cuatro pagos, se totalizaron $218 millones.
Para Fuentes eso significa que existe una asignación de gastos que es posible destinarla a otras necesidades que se requieren en el presupuesto.
“Es así que ese excedente de $21.1 millones se ha solicitado a la Asamblea para que se pueda destinar para la alimentación de los privados de libertad que están en los Centros Penales y para los policías”.
Reiteró que no se están tocando los intereses de los trabajadores generados de sus ahorros en las AFPs, ni los Fondos de los Trabajadores, ya que es una asignación de gastos que culmina con el pago de los $218 millones y ahora hay que buscar financiamiento para el Ministerio de Justicia y Seguridad.
Para el ministro de Hacienda, este requerimiento que hoy piden al Palacio Legislativo, ya no se daría para el 2021, porque el presidente Nayib Bukele propuso que los presupuestos vayan completos, de ahí parten los incrementos en alimentación, medicinas y escalón para evitar que el otro año tengan que estar solicitando a la Asamblea refuerzos presupuestarios.
Debido al supuesto déficit de Justicia, Centros Penales, que necesita $14 millones, no ha podido contratar la alimentación de noviembre y diciembre, ni tampoco para los policías.
Mientras tanto, los legisladores no están totalmente convencidos de las explicaciones de los funcionarios del Ejecutivo y por el contrario, adelantaron que no avalarán ninguna petición que trastoque las pensiones.
