El canciller salvadoreño, Hugo Martínez, dijo este martes que los países del Triángulo Norte de Centroamérica deben garantizar prosperidad y seguridad a sus habitantes para disminuir el fenómeno de la inmigración ilegal a los Estados Unidos, país con el que se sostendrá una conferencia al más alto nivel en ambos enfoques. Esto en el marco del plan “Alianza para la Prosperidad”.
“En la medida que garanticemos seguridad y prosperidad, el tema migratorio se irá resolviendo de manera estratégica, ya no coyuntural“, dijo Martínez, en el marco de la celebración del Día de la Hermandad entre Estados Unidos y El Salvador.
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El funcionario salvadoreño aseguró que se deben resolver las causas estructurales de la migración ilegal para impedir que se siga repitiendo esta acción, la cual según dijo, ha disminuido considerablemente en los últimos meses.
“Reportes de llegadas a la frontera sur de Estados Unidos han bajado en un 30%, y de niñas, niños y adolescentes no acompañados han bajado hasta un 80%”, expresó.
Por su parte, la embajadora de los Estados Unidos en El Salvador, Jean Manes, dijo que el tema de la migración es ampliamente abordado entre ambos países, pero que aspectos como la continuidad del Estatus de Protección Temporal (TPS por sus siglas en inglés) deberá ser discutido por los implicados.
“Sobre el TPS, no es algo en común para toda la región, es solo para El Salvador y Honduras y será abordado seguramente entre el vicepresidente estadounidense y los presidentes del Triángulo Norte en reunión privada, seguramente“, expresó Manes.
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Autoridades tanto de Estados Unidos como de distintos países de la región, sostendrán una conferencia a realizarse el 15 y 16 de junio en la que discutirán los temas de seguridad y prosperidad, y en la que se analizarán los resultados de planes como “El Salvador Seguro” o “Plan 20-20” de Honduras, con miras a demostrar los resultados de la inversión estadounidense en la región para erradicar la inmigración ilegal.
El Gobierno de los Estados Unidos ha suspendido el TPS que beneficiaba a miles de ciudadanos de Haití que se encontraban en esa nación norteamericana, por lo que autoridades salvadoreñas están en alerta y a la espera de la decisión de la administración Trump sobre el futuro del TPS para más de dos millones de salvadoreños que viven de manera irregular en Estados Unidos.
