En vista del nuevo informe del Panel Intergubernamental del Cambio Climático (IPCC), el Ministerio alemán de Medio Ambiente y el de Investigación exigieron un mayor compromiso en la lucha contra el calentamiento global.
"Los próximos años son decisivos para que nuestro planeta no pierda su equilibrio", declaró la ministra alemana de Medio Ambiente, Svenja Schulze. En su opinión, no se debería perder más tiempo y retrasar la protección del clima.
Por su parte, Jochen Flasbarth, secretario de Estado alemán de Medio Ambiente, añadió que el hecho de saber que un aumento de dos grados de la temperatura tendría consecuencias mucho más graves para millones de personas que el aumento de 1,5 grados debería ser motivo suficiente para "ponerse manos a la obra".
La ministra alemana de Investigación, Anja Karliczek, exigió que se explote mucho más el potencial de la ciencia en la protección del clima. "Las buenas ideas procedentes de la investigación y una acción determinada de la política, la economía y la sociedad pueden impulsar los cambios necesarios", declaró.
Su secretario de Estado parlamentario, Michael Meister, dijo que el informe del IPCC era una "alarma" para que la política despierte: "Tenemos ante nosotros los hechos para la política del medio ambiente".
El IPCC declaró que aún es posible limitar el calentamiento global a 1,5 grados, pero solo si se reduce inmediata y decididamente la emisión de gases de efecto invernadero, en especial del dióxido de carbono (CO2).
Al mismo tiempo, los científicos han dejado claro que un aumento de temperatura de dos grados tendría consecuencias significativamente más drásticas, por ejemplo, sobre el riesgo de hambre y pobreza para la población mundial, la probabilidad de fenómenos meteorológicos extremos, la subida del nivel del mar o la biodiversidad.