martes, 16 abril 2024

#YoLeCreoALasAmorales

¡Sigue nuestras redes sociales!

Denunciar la violencia no es fácil, mucho menos cuando se trata de la violencia sexual que se ejerce contra nosotras mismas o contra otras mujeres. Es más difí­cil aun cuando los perpetradores son personas que ocupan puestos de poder en determinados espacios, que además son vistos como respetables ante la sociedad.  No es sencillo denunciar a tu profesor de la Universidad, en sociedades que le creen más fácil al agresor que a la ví­ctima. Por esa razón, muchas agresiones sexuales se quedan sepultadas en el cementerio de los silencios, siendo las ví­ctimas y sobrevivientes las únicas que cargan con el peso de todas las palabras no dichas, de todas las denuncias no realizadas.

No obstante, existen mujeres que se atreven a romper el silencio, a denunciar y también a acompañar a aquellas que han sido ví­ctimas de violencia, manifestándoles su respaldo, apoyo y acompañamiento. Este es el caso de la Colectiva Amorales -a quienes conozco desde mi activismo en diferentes espacios a nivel centroamericano y latinoamericano-, la cual surge como iniciativa de mujeres jóvenes artistas del hermano paí­s de El Salvador, que desde sus inicios se ha dedicado a la defensa de los derechos de las mujeres a través del arte, acompañando denuncias que otras compañeras artistas han realizado respecto a actos de violencia en su contra, particularmente la violencia sexual.

En 2016, Colectiva Amorales presentaron la denuncia contra un profesor de teatro de la Universidad de El Salvador, quien haciendo uso de su rol de maestro y estatus de poder agredió sexualmente a varias de sus alumnas. Como respuesta ante estas acciones, el 27 de mayo se presenta una denuncia en contra de las compañeras activistas, defensoras de derechos humanos de las mujeres, integrantes de la Colectiva Amorales, por parte de este profesor que ha sido denunciado por varias estudiantes de teatro por agresiones sexuales.

En el contexto de nuestros paí­ses, que se caracterizan por la preponderancia de un sistema patriarcal, es un acto de valentí­a muy necesario el denunciar la violencia que se ejerce contra nosotras las mujeres, siendo las mujeres jóvenes y estudiantes quienes nos enfrentamos a otra barrera sistémica, además de la patriarcal: la adultocéntrica. Es por eso que considero importante apoyar la labor que realizan las mujeres jóvenes como las compañeras de Colectiva Amorales.

Estoy plenamente convencida de que debemos defender nuestro derecho a la libre expresión y que no se debe criminalizar el accionar polí­tico de las mujeres. Desde Guatemala, quiero manifestar mi rechazo ante las acciones tomadas en contra de las compañeras salvadoreñas, defensoras de nuestros derechos como mujeres y me uno a este movimiento de apoyo y sororidad para decir: #YoLeCreoALasAmorales, condenando todo intento de persecución polí­tica y judicial en su contra y exigiendo a la Universidad de El Salvador que no encubra a los docentes que tienen denuncias de acoso y agresión sexual.  Además, pidiéndoles a las autoridades correspondientes como las del Instituto Salvadoreño para el Desarrollo de la Mujer que, como institución encargada de velar por la garantí­a de los derechos de las mujeres, esté siempre vigilante ante estos procesos que ponen en peligro todos los avances logrados por el movimiento de mujeres en El Salvador.

¡Hola! Nos gustaría seguirle informando

Regístrese para recibir lo último en noticias, a través de su correo electrónico.

Puedes cancelar tu suscripción en cualquier momento.

spot_img

También te puede interesar

Participe con su comentario

Karen Molina
Karen Molina
Columnista Contrapunto
spot_img

Últimas noticias