Autoridades de seguridad y el vicepresidente salvadoreño, Oscar Ortiz, inauguraron la ampliación de la Granja Penitenciaria para Mujeres de Izalco, Sonsonate. El objetivo de la obra es contribuir a la generación de espacios para la reeducación y reinserción de las privadas de libertad.
Los ajustes al centro penitenciario permitirán albergar a 1 mil 152 internas en fase de semilibertad que forman parte del programa “Yo Cambio”. Algunas de ellas se encuentran junto a sus hijos en el Centro de Desarrollo Infantil (CDI).
“Lo que estamos haciendo ahora con la puesta en marcha de esta granja penitenciaria es apostar por una seguridad más sostenible”, explicó Ortiz.
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Según las autoridades penitenciarias, la mejora de los espacios para la rehabilitación permitirá la construcción de un nuevo modelo penitenciario con un enfoque de género.
El vicepresidente explicó que la apuesta por la reinserción es clave para pensar en un “futuro más seguro”. “No podemos hablar de una seguridad sostenible en los próximos años con un sistema penitenciario colapsado”, alegó.
Además, el vicemandatario recalcó que los centros penales siempre fueron la parte más descuidada de todo el sistema y de toda la política. Era “como si el objetivo y el fin era perseguir al que quebrantaba la norma legal y mandarlo a una prisión [“¦]. Y nos equivocamos como país; ahí no se terminaba el problema. Ahí comenzó el problema”, recalcó.
Dentro de las actividades que las internas podrán realizar se encuentran talleres de corte y confección, cosmetología, agricultura, bisutería, cocina, ornato y limpieza, talleres de pintura y jardinería.
La inversión para la remodelación fue de $6.6 millones de dólares financiados por el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE). Esto permitió mejorar la instalación que fue inaugurada en 2011 y que ahora cuenta con cuatro edificios de dormitorios de tres niveles. Además se incluyeron espacios para áreas de comedor, cocina y baños.
