Con el pasar de los años la risiliencia a los efectos del cambio climático es más necesaria, sobre todo en el sector agropecuario donde descansa buena parte de la base productiva del país. Autoridades estiman que este rubro provee el 20% de empleos a nivel nacional.
Para incrementar la producción de alimentos, generar más empleos y reducir los efectos de desastres y fenómenos, el Banco de Desarrollo de El Salvador (BANDESAL), lanzó del Programa Banca Agropecuaria en la Asociación Ganadera de la Zona Norte, Chalatenango.
Según la presidente del BANDESAL, Mélida Mancía, con esta iniciativa se busca “apoyar grupos vulnerables e históricamente excluidos”, considerando que los pequeños y medianos productores enfrentan dificultades a la hora de buscar financiamiento.
Entre la proyecciones se estima poner a disposición del $38 millones para respaldar la producción de 1,200 micro, pequeñas y medianas empresas y mantener 11 mil empleos.
El sector agropecuario es uno de los sectores más impactados por el cambio climático, en los últimos años se han reportado con una frecuencia casi anual fenómenos como: tormentas tropicales, huracanes y sequías, que han afectado la producción nacional.
En el lanzamiento del programa productores del sector agropecuario en Chalatenango conocieron los detalles de este beneficio. Este rubro es uno de los que ha sufrido mayores afectaciones tras el cambio climático. Al cierre del 2015, se reportaban pérdidas de $100 millones en maíz y frijol.
El ministro de Agricultura y Ganadería, Orestes Ortez, explicó que en el país el agro provee del 20% de los empleos a nivel nacional, por lo que apostarle al crecimiento y mayor productividad es clave. Añadió que la agricultura es una plataforma económica ya instalada, sin embargo, ha sido relegada.
Con esfuerzos como el financiamiento, el Gobierno salvadoreño ha manifestado su intención de reivindicar este sector. Autoridades reiteraron que la nueva herramienta busca el crecimiento del sector agropecuario, reducir las brechas de mercado, incrementar la producción, generar más empleo y bridar acceso al crédito.
Por otra parte, se busca fortalecer el capital humano y además impulsar un cambio de mentalidad para mejorar las practicas y adaptarse a los efectos del cambio climático para garantizar los niveles de seguridad alimentaria y soberanía en el país.
En ocasión anterior, Ángel Umaña, quien se dedica al ganado y a la producción de leche y lácteos en la zona para central del país explicó a Contrapunto, que al igual que cientos de productor de a nivel nacional, sufrió el impacto de la sequía.
“La producción del zacate se redujo en un 20%, por lo tanto tuvimos menos alimento para las vacas. Esto también nos implica un casto extra en comida no tradicional o procesada para las vacas, cosa que sale de nuestro presupuesto”, explicó.
Durante el 2015, Ángel no contempló adquirir un préstamo o financiamiento, sin embargo, tiene claro que la situación del invierno es incierta ya que persisten los efectos del fenómeno del niño.
La Banca Agropecuaria potenciará la producción de granos básicos, ganadería, cacao, frutas, hortalizas azúcar, miel, pesca y otros. Asimismo, capacitará a los productores en la implementación de nuevas tecnologías, nuevos emprendimientos y productos innovadores.
Casos como el de este productor, son los que BANDESAL tiene bajo la lupa y busca apoyar de forma directa y a través de intermediarios como el Banco de Fomento Agropecuario (BFA) y el Banco Hipotecario (BH), para que el agricultor también pueda apostarle a la modernización y adoptar sistemas de riego para prepararse para posibles eventos o catástrofes naturales.