Organizaciones pro migrantes radicadas en Estados Unidos se manifestaron este lunes frente a la sede de la Embajada Americana en El Salvador para exigir al Gobierno norteamericano que desista de la deportación de compatriotas, en especial del salvadoreño Francisco Aguirre, quien está detenido y sería repatriado por haber ingresado a los Estados Unidos de manera ilegal hace 15 años.
“Estamos acá para pedir al Gobierno estadounidense que retire los cargos en contra de nuestro compañero quien es un líder de los jornaleros en Oregon. Enfrenta cargos que podrían condenarlo a 20 años de cárcel”, dijo Amy Mackley, abogada de la Red Nacional de Jornaleros en los Estados Unidos.
El caso de Francisco es emblemático según las organizaciones demandantes pues su hijo de 10 años, fue uno de los cientos de niños que viajaron no acompañados y de manera ilegal a los Estados Unidos el año pasado, pero fue detenido por autoridades de Migración. Por temor a continuar en un sitio de detención, sus padres optaron por regresarlo a El Salvador donde pocos meses después fue asesinado.
“Su hijo decidió regresarse a El Salvador. Poco después de su regreso ocurrió esta tragedia para él y su familia. Aún con esta tragedia, Estados Unidos mantiene los cargos en contra del señor Aguirre y con posibilidad de deportarlo”, agrega la abogada Mackley.
Los manifestantes, quienes en su mayoría son salvadoreños radicados en Estados Unidos, exigieron al Gobierno salvadoreño que presione a su par estadounidense para que extienda la protección de migrantes salvadoreños que huyen de la violencia, y que se respete sus derechos humanos.
“Lo que pedimos es que El Salvador presione a Estados Unidos para que otorgue el Estatus de Protección Temporal (TPS) a niños refugiados; la residencia permanente a quienes llevan más de 16 años viviendo en los Estados Unidos, y que pare la persecución de Francisco Aguirre quien es un líder de jornaleros en Oregon, y cuya vida corre peligro si regresa a El Salvador”, dijo Pablo Alvarado, director la Red nacional de Jornaleros y Jornaleras en los Estados Unidos.
El pasado 8 de abril el presidente salvadoreño, Salvador Sánchez Cerén, sostuvo una reunión con 120 representantes de organizaciones de salvadoreños en el exterior, quienes manifestaron al mandatario sus experiencias relacionadas a los programas que impulsa el Gobierno para la atención y vinculación con salvadoreños en el exterior.
En esta reunión, los manifestantes aprovecharon para hacer del conocimiento del Ejecutivo estas peticiones a fin de que se garantice la estabilidad laboral y migratoria de compatriotas en los Estados Unidos.
Un informe de la Dirección General de Migración y Extranjería señala que durante 2015, Estados Unidos deportó un total de 21,752 salvadoreños. En Estados Unidos viven 2.5 millones de salvadoreños de los tres millones residentes en el extranjero, quienes en 2014 enviaron $4,217. 2 millones de dólares en remesas familiares, equivalentes a 16.5% del PIB
A partir de enero de 2016, el Gobierno estadounidense comenzó a implementar una política de deportaciones con la que pretende expulsar a 100 mil personas que se encuentran de manera ilegal, una política que no es del agrado de El Salvador.