La falta de acuerdos para los preparativos del acto de traspaso de mando del primero de junio continúan. Este jueves, el presidente electo, Nayib Bukele, anunció una posible juramentación alejada de las autoridades salvadoreñas, lo que sería la primera en la historia.
Tras suspenden contacto con el Gobierno, Bukele denunció una nueva discrepancia por parte de la Asamblea Legislativa.
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“Luego acusan de matonería. En toda la historia reciente de El Salvador, el acto se ha hecho de mutuo acuerdo con el Gobierno entrante y, en nuestra historia reciente, jamás se ha hecho en la Asamblea Legislativa. Hagan su acto solos si quieren, yo me juramentaré con el pueblo”, escribió el mandatario electo en su cuenta de Twitter.
Esta mañana, el presidente de la Asamblea, Norman Quijano, le dijo a la prensa que por mandato de ley, le corresponde a la Asamblea dar posesión al nuevo presidente y que junto a la directiva, ya han acordado que el acto se realizará el primero de junio, a las 10:00 de la mañana, en el Salón Azul.
De acuerdo con Bukele, su comisión no fue tomada en cuenta en esta decisión, pese a que los preparativos siempre se han organizado entre los representantes del Gobierno actual y el entrante. También, desaprobó que el acto quiera desarrollarse en el Legislativo, cuando en ocasiones anteriores se ha efectuado en el Centro Internacional de Ferias y Convenciones (CIFCO).
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Bukele denunció que tanto la presidencia como la Asamblea están tratando de perjudicar el evento. Por lo que anunció que su juramentación será frente a los salvadoreños que decidieron darle el voto en las pasadas elecciones.
Hasta el momento se desconocen los detalles sobre la realización del evento. Según el artículo 131 de la Constitución, el acto de traspaso de mando se deberá realizar el primero de junio, con la intervención de las autoridades salvadoreñas y el nuevo mandato.
