De forma voluntaria los lectores de ContraPunto participaron en la medición realizada a través del Sondeo (*) relacionado con el despliegue de la Fuerza de Tarea “Vulcano” de la Fuerza Armada en 25 puntos de la zona metropolitana de San Salvador, para acompañamiento a tareas de seguridad pública a la Policía Nacional Civil (PNC).
Ante la pregunta planteada: ¿Está de acuerdo con el despliegue militar del Gobierno para incrementar la seguridad en San Salvador? De 102 votos recibidos, el 77.4% dijo que sí está a favor del despliegue militar en la capital, frente a un 22.5% que considera que no es adecuado el uso de la Fuerza Armada para estas labores.
La medida tomada por el Ejecutivo el pasado 18 de septiembre ha tenido opiniones a favor y en contra. Si bien la población en general aplaude este tipo de despliegues, hay quienes que critican por ejemplo los excesos al sacar artillería pesada a las calles.
El despliegue militar también tiene detractores de parte de la sociedad civil. La Fundación de Estudios para la Aplicación del Derecho (FESPAD) considera que desplegar nuevamente el uso de la Fuerza Armada en labores de seguridad en San Salvador, no es conveniente y puede tomarse como un grave retroceso al cumplimiento de los Acuerdos de Paz, pues asegura que, para perseguir la criminalidad, la represión no debe ser la única herramienta.
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En tanto, estudiantes de la Universidad de El Salvador, uno de los puntos con presencia militar, protestaron ayer a las afueras de dicha institución, debido a que señalan que jóvenes se sienten acosados por su forma de vestir. Insistieron que la artillería pesada no les hace sentir seguros.
Su implementación se da en momentos en que un juez absolvió a cinco agentes del Grupo de Reacción Policial (GRP) acusados de ejecuciones extrajudiciales en contra de un joven empleado de la finca San Blas en La Libertad, que según testigos, no era pandillero, trató de explicarlo a los agentes, imploró por su vida, y le dispararon en la cabeza.
La estrategia de seguridad también incluye la ejecución de actividades culturales, deportivas y de recreación que permitan llevar otros espacios a la población en materia de prevención.