Cientos de jóvenes de los municipios de Nombre de Jesús, Nueva Trinidad y Arcatao desfilaron por la calle principal de Chalatenango para promover una agenda política de juventudes rurales en El Salvador.
Más de 300 jóvenes del nororiente de Chalatenango participan en la construcción de una agenda denominada “Nuestra Voz Cuenta”, con el objetivo de generar cambios sustanciales en la juventud de la zona rural del país, explicó Sandra Margarita Aguilar, técnica de campo del Convenio Joven Acción del Centro Bartolomé de Las Casas.
“Estos jóvenes pertenecen a varios grupos que se han venido formando con el Centro Bartolomé de Las Casas (CBC) y el Convenio Joven Acción. Hemos tratado de hacer mayor énfasis en dos palabras: “˜Jóvenes Rurales”™, porque la mayoría de políticas que se crean o se han venido implementando a lo largo de este tiempo, consideramos que tienen cierta deficiencia en el enfoque a la juventud rural”, expuso Aguilar.
La presentación de la agenda política de juventudes rurales forma parte del esfuerzo realizado por la Plataforma Juvenil Intergenérica (PJI), como una alianza política comprometida con el trabajo inclusivo de mujeres y hombres jóvenes rurales para la gobernabilidad democrática a través de los gobiernos municipales, espacio de articulación apoyado por organizaciones como el Centro Bartolomé de Las Casas (CBC).
“La Plataforma Juvenil Intergenérica es un espacio que nos potencia para lanzarnos como juventudes rurales, nos anima a la participación política a través de la formación de liderazgo juvenil. Esto ha contribuido a la elaboración de una agenda de demandas en temas de justicia de género, ambiente, masculinidades, gobernabilidad democrática y migración que presentaremos a las autoridades salvadoreñas”, manifestó Patricia López, joven del municipio Nombre de Jesús del departamento de Chalatenango.
Chalatenango es el departamento con menor ingreso familiar y el segundo con mayor desempleo, según datos de la Dirección General de Estadísticas y Censos (DIGESTYC) en su Encuesta de Hogares de Propósitos Múltiple 2017.
La migración de jóvenes es masiva en el campo, por lo tanto, es preciso que los gobiernos locales y el Estado generen oportunidades de desarrollo para reducir los niveles de exclusión y marginación educativa y laboral hacía la juventud salvadoreña.
“No se puede hablar de desarrollo pleno y de una incorporación de los jóvenes rurales a la vida productiva y al mercado laboral sin crear primero políticas públicas a nivel municipal y nacional, que permitan que estos jóvenes excluidos de los procesos educativos y al trabajo. Para ello debemos construir una plataforma, desarrollar proyectos y programas para reenvidar a la juventud rural”, aseguró Yeymi Muñoz, directora del Instituto Nacional de la Juventud (INJUVE).
La migración de jóvenes del campo a la ciudad es casi del 35% de un total de casi dos millones de jóvenes en edades de 15 a 29 años.