El fiscal General de El Salvador, Douglas Meléndez, denunció este lunes haber recibido amenazas de muerte así como contra familia, e incluso, "le dieron como límite el 15 de agosto para permanecer en el país".
“Eso significa que en cualquier momento puede suceder cualquier cosa“, aseveró el destacado funcionario en una entrevista de la televisión local. Y reiteró que para él lo más graves es que "están amenazando a mi familia“.
Meléndez preside, desde enero de 2016, el también llamado Ministerio Público (MP), que en el caso de El Salvador, es la entidad que posee el privilegio de la investigación criminal. Meléndez ha actuado directamente en sonados casos contra expresidentes de El Salvador por casos de corrupción, así como en desmantelamientos de bandas de narcotráfico y de pandillas o maras.
Hablando en un lenguaje popular Meléndez afirmó que “una de las cosas que dice la amenaza es que he halado mal las pitas y que si sigo haciendo eso me van a matar, pero amenazan a mi familia, y me daban plazo hasta el 15 de agosto para abandonar el país”.
“Voy a seguir haciendo los esfuerzos necesarios, aún a costa de mi integridad. Voy a seguir adelante investigando el narcotráfico, a los lavadores, a los corruptos“, puntualizó.
Meléndez consideró como "muy grave la amenaza" que le llegó desde hace un mes, por ello lo hizo público, manifestó, "tan vez ayude a detener su materialización“.
Finalmente agregó que hay otra amenaza también grave en contra su persona, que se "está investigando a los responsables".
El Salvador es uno de los países más peligrosos del mundo con una tasa de homicidios de 80 por cada 100.000 habitantes, lo que para la Organización Mundial de la Salud (OMS) representa ocho veces lo que reconoce como epidemia.