El Salvador se ha convertido en la sede regional para Latinoamérica y el Caribe del Consejo Internacional para las Ciencias (ICSU por sus siglas en inglés), según las autoridades de dicha entidad la elección se debe al desarrollo científico y la innovación que el país ha tenido en los últimos años.
El secretario general del ICSU, el científico australiano David Black, señaló que la selección de El Salvador se debe a la influencia grande y el interés inmenso, y el compromiso que El Salvador ha demostrado para impulsar el desarrollo científico. Black expresó que el país ha demostrado sus compromisos con la ciencia a pesar de que se ha incorporado recientemente, en 2013, al Consejo.
El mandatario Salvador Sánchez Cerén expuso en la reunión con los representantes del ICSU que esta es una oportunidad “muy importante para nuestra comunidad científica de poder intercambiar con ustedes e ir encontrando el apoyo que nos permita avanzar lo más rápido posible en lograr dotar al país de una estrategia para el conocimiento y la ciencia”.
Por su parte, Herlinda Handal, viceministra de de Ciencia y Tecnología, expresó que “haber obtenido la sede del Consejo Internacional para la Ciencia forma parte de esta estrategia de potenciar al país en su capacidad de creación de conocimientos, en darle esta infraestructura organizacional y física a nuestros jóvenes, también a nuestros investigadores, que están en las diferentes universidades, para que juntos con sus alumnos pues vayan construyendo este nuevo El Salvador”.
Manuel Limonta, director de la oficina regional para América Latina y El Caribe del ICSU, destacó que El Salvador fue elegido de entre varios países que solicitaban ser sede de este organismo, entre ellos Uruguay y Argentina.
“El Salvador se convierte a partir de este momento en el epicentro de la discusión estratégica para el desarrollo científico que lidera el ICSU, se convierte en el epicentro estratégico de coordinación, de vinculación con otros países y esto indudablemente genera la posibilidad de mayor colaboración, de mayor presencia en la región”, dijo Limonta.
El organismo tiene otras dos sedes a nivel mundial: en África, cuya sede está en Sudáfrica; en la región Asia-Pacífico, con sede en Malasia. El ICSU fue creado en el año 1931 y su organización cuenta con 120 miembros que representan a 144 países de todo el mundo; asimismo, también está relacionado con 31 uniones científicas.
Los tres ejes fundamentales del trabajo del ICSU son: la universalización de las ciencias, independientemente de la ubicación geográfica de los países, de sus características socioeconómicas, sociopolíticas y socioculturales; la colaboración científica internacional; y la ciencia para la política, centrando esfuerzos para que los líderes de cada país cuenten con elementos científicos suficientes que les ayude en la toma de sus decisiones.