El Partido Demócrata logró obtener mayoría en la Cámara de Representantes tras las elecciones de medio término de este martes en Estados Unidos, un movimiento que podría tener repercusiones a nivel mundial, según analistas, pues la oposición del presidente Donald Trump ahora tendrá la facultad de lanzar investigaciones sobre sus negocios multinacionales y sus vínculos políticos con otros gobiernos del mundo.
El control de la cámara baja deja a los demócratas con un arma potente: citaciones judiciales de cumplimiento obligatorio, con los que podrán obligar a funcionarios, empresarios y otras figuras a entregar documentos y hacer declaraciones bajo juramento.
La Casa Blanca probablemente resistirá esos pedidos presentando demandas en las cortes, pero el alcance de las citaciones podría extenderse mucho más allá de Washington.
Ello implica, por ejemplo que el Congreso podrá investigar ahora las 18 marcas que China ha aprobado en meses recientes, vinculadas a Trump y a su hija Ivanka. La pregunta es si hubo allí un conflicto de interés. China dice que da tratamiento igual a todas las solicitudes comerciales, pero ahora la cámara baja podrá indagar si China trató de congraciarse con Trump para lograr concesiones políticas o diplomáticas.
Pese a ello, Trump calificó de “exitosa” la jornada electoral, que además permitió a su partido mantener el control del Senado.
"Tremendo éxito esta noche. ¡Gracias a todos!", escribió en su cuenta de Twitter.
Pese a la resistencia Trump, el Partido Demócrata recuperó las riendas de la Cámara de Representantes gracias a una oleada de nuevos candidatos y al entusiasmo de los votantes. Así, rompió con el monopolio de los republicanos en Washington y preparó el escenario para una multitud de pesquisas sobre el presidente que podrían afectar a su gobierno durante los próximos dos años. Los republicanos tenían la hegemonía de la Cámara desde 2010.