El Consejo Nacional de Educación (CONED) presentó al presidente, Salvador Sánchez Cerén, El Plan El Salvador Educado, el cual pretenden, según el mandatario, que la escuela sea un eje central para orientar el ambiente escolar y convertirlo en un espacio seguro íntegro y exclusivo, tanto para maestros como para alumnos.
Según el CONED para poner en marcha el plan es necesario un acuerdo de todos los sectores de la sociedad. José María Tojeira, exrector de la Universidad Centroamericana “José Simeón Cañas” (UCA) y parte del Consejo, aseguró que “este Plan El Salvador Educado debe convertirse en una opción nacional, en eso que con tanta frecuencia mencionamos como un acuerdo de país, independientemente del gobierno que se tenga, un proyecto de realización común que nos involucre a todos política, económica y socialmente”.
El plan plantea seis desafíos para el sistema educativo: escuelas libre de violencia, docentes de calidad, atención al desarrollo integral de la primera infancia, 12 grados de escolaridad universal, educación superior para un país productivo, innovador y competitivo; e infraestructura acorde a una educación integral y de calidad.
El CONED ha propuesto 104 acciones con metas de corto, mediano y largo plazo, que requieren una inversión de 12 mil 573 millones de dólares para un período de 10 años, lo cual supone una inversión anual de $1,257 millones adicionales en educación.
“Esta es la esencia del Plan El Salvador Educado. Un país educado construye convivencia, genera su bienestar y construye un mejor futuro, no se trata, sin embargo de cualquier educación, sino una educación crítica con sólidos fundamentos humanistas, ética, científicos y técnicos que nos permita edificar una sociedad próspera justa, inclusiva y solidaria”, señaló Sánchez Cerén.
De igual forma mencionó que los planteamientos del Plan El Salvador Educado están basados en la realidad de El Salvador y que no es posible hablar de educación “si no ponemos los pies en la tierra. La violencia es un fenómeno que está allí y lo enfrentamos porque es necesario para garantizar la seguridad de la sociedad”. Y agregó que el Plan traerá profundas transformaciones para fortalecer una educación universal .
Expresó que enfrentan grandes retos en educación y uno de ellos es el financiamiento de la educación. Aclaró que aumentar significativamente el presupuesto en educación exige un amplio debate en torno al sistema fiscal, pues sin una reforma fiscal progresiva será imposible contar con los recursos para hacer frente no solo a los desafíos educativos sino a otros grandes problemas nacionales principalmente el de la inseguridad.
Ante eso, Tojeira reiteró que “Un acuerdo fiscal que lleve al uso adecuado de los recursos necesarios sería un paso clave en este proceso, así como también colaborar creativamente con todos los recursos privados y de la sociedad civil, dedicados al cultivo de la educación”.