La reforma a la Ley de Pensiones que permitía a los hombres cotizantes de las AFP un anticipo de hasta el 25% de su saldo de pensiones, fue vetado por el presidente salvadoreño, Nayib Bukele.
El procedimiento acordado por los diputados salientes de la Asamblea Legislativa, habilitaba desde el 15 de mayo de este año a los los hombres cotizantes de las AFP mayores de 40 años de edad, podrán pedir el anticipo de hasta el 25% de su saldo de pensiones; mientras que En el caso de las mujeres no habrá límite de edad. El requisito es tener cotizados como mínimo 10 años.
Asimismo, la reforma implicaba que a partir del 1 de marzo de 2022 la edad ya no sería un requisito para poder pedir un adelanto del 25 % de la pensión.
Sin embargo, Bukele consideró que el decreto 863 de la administración del parlamento salvadoreño saliente era inconstitucional.
El mandatario aseguró que aprobarlo pondría en riesgo la seguridad social y la seguridad jurídica del país.
Para justificar su decisión, Bukele consultó a la Superintendencia del Sistema Financiero por las cantidad de afiliados que cumplirán los requisitos que el decreto establece; entiéndase: hombres que cumplirán 40 años a partir del 15 de mayo de 2021, mujeres de cualquier edad, y hombres de cualquier edad con al menos 10 años de cotizar al sistema.
En función de eso, Bukele consideró que absolutamente todas las personas afiliadas al sistema pedirán un adelanto del 25 % de su saldo de pensiones, y que eso provocaría que las AFP necesiten $1,406.8 millones para solventar la necesidad de 319,485 afiliados que entran en las dos primeras categorías (hombres mayores de 40 años y mujeres de cualquier edad afiliadas a AFP).
Asimismo, Bukele mantuvo su interpretación matemática y valoró que, a partir del 1 de marzo de 2021, habrá 56,531 personas más que pedirán anticipo de saldo del 25 % de su pensión y que ninguna dejará de hacerlo. Eso obligaría a las AFP a tener listos otros $145.7 millones adicionales para poder pagar los anticipos.
En ese punto, Asafondos reportó hace un par de semanas que en el primer trimestre de este año había entregado $102.2 millones en anticipos de ahorro a afiliados. Y que de 2017 (cuando se aprobó la reforma para que los afiliados pudieran solicitar anticipos de saldo) a la fecha, la cantidad total de adelantos era de $440.2 millones. Además, entre enero y marzo de este año, hubo 15,135 afiliados que solicitaron adelanto de saldo.
De nuevo con la interpretación de Bukele para justificar su veto, el presidente explicó que los fondos de pensiones “están diseñados para que la mayor parte de sus recursos sean invertidos en instrumentos financieros que devengan rentabilidad”. A partir de eso, Bukele aseguró que hacer frente a compromisos no previstos, como devolver un 25 % de saldo a sus afiliados, podría hacer que las AFP presenten pérdidas. “Se volverá necesario que las administradoras vendan instrumentos más líquidos, corriendo el riesgo de materializar pérdidas”, menciona el presidente en su veto.
Así, al correr el riesgo de tener pérdidas, Bukele asume que esto podría colocar “presión de liquidez a los fondos de pensiones, que no estaba prevista originalmente, pudiendo ocasionar un fuerte impacto negativo”.