El Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS) informó este jueves sobre la muerte de cuatro personas más que eran atendidas en un hospital de México tras la explosión registrada el pasado viernes por una toma clandestina de gasolina en Tlahuelilpan, del estado de Hidalgo.
La cifra incrementó de 96 a 100 fallecidos y según el IMMS, 11 personas más continúan en estado de gravedad y están siendo atendidas en diferentes hospitales de la localidad.
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El siniestro se produjo luego que un grupo de pobladores fracturó un ducto de hidrocarburo y empezó a sustraer gasolina durante alrededor de dos horas, pese a que el Ejercito de ese país intentó controlar el derrame y a la multitud que se fue acercando cada vez más.
Pasada las dos horas, se originó la explosión que dejó en el momento varios muertos y otros afectados que a una semana del suceso siguen en condiciones críticas.
El presidente de México, López Obrador, desde que llegó al poder en diciembre comenzó un combate frontal para impedir el robo de hidrocarburos, una de las problemáticas que afronta constantemente el país.