El Nuncio Apostólico, León Kalenga, y el grupo Amigos de Romero anunciaron las actividades programadas por la celebración de los cien años del nacimiento del beato mártir Monseñor Óscar Arnulfo Romero y Galdámez.
En Ciudad Barrios, departamento de San Miguel, autoridades de la iglesia católica señalaron que las actividades serán entre los meses de mayo y junio, de acuerdo con lo anunciado este martes.
Entre ellas se destaca la misa que tendrá lugar en Catedral Metropolitana el 21 de mayo. Durante la última semana de este mes habrá una exposición de materiales sobre el mártir en la Fundación Romero.
El 24 de junio habrá una peregrinación desde el Hospital Divina Providencia hasta la cripta de la Catedral Metropolitana.
Según una convocatoria del Arzobispado de San Salvador, el grupo Amigos de Romero reúne a varias entidades, algunas no católicas, que promueven la vida y obra del beato. Bajo la dirección del Nuncio Apostólico han elaborado un programa de actividades en honor al día en el que se conmemora su natalicio.
Monseñor Oscar Arnulfo Romero trastocó fronteras y además de ser reconocido como un importante líder religioso, habita en la memoria histórica de un país donde las injusticias y la impunidad persisten. Se le reconoce por promulgar la “opción preferencial y solidaria por los pobres” y promover el valor de la verdad.
Óscar Arnulfo Romero, nació en Ciudad Barrios, San Miguel, el 15 de agosto de 1917. Fue párroco de Anamorós, La Unión, luego llamado a San Miguel donde estuvo 20 años. En 1970 fue nombrado Obispo Auxiliar de San Salvador y en 1974 fue nombrado Obispo de Santiago de María. Allí conoció de manera directa la realidad que afrontaban los campesinos, sindicatos y estudiantes.
Fue nombrado Arzobispo de San Salvador en 1977. Un mes después de su nombramiento fue asesinado su amigo, el padre Rutilio Grande. El suceso marcó profundamente su labor pastoral y de él retomó su lema de trabajo: “Sentir con la iglesia”.
Monseñor Romero fue declarado beato y mártir por la fe, y actualmente El Vaticano conoce de su proceso de canonización para llegar a los altares de la iglesia católica; el próximo 15 de agosto se cumplen cien años de su nacimiento y en marzo. De su martirio en la capilla del “hospitalito” Divina Providencia se cumplieron 37 años.