Agencia Alemana de Prensa (dpa)
El presidente de Alemania, Frank Walter Steinmeier, pidió hoy perdón a los familiares de las víctimas del asalto terrorista al equipo israelí que asistió a los Juegos de Múnich de 1972.
“Les pido perdón como jefe de Estado de este país y en nombre de la República Federal de Alemania por la falta de protección de los atletas israelíes durante los Juegos Olímpicos de Múnich y por la falta de esclarecimiento posterior; por el hecho de que pudiera ocurrir lo que ocurrió”, dijo Steinmeier.
Las palabras de Steinmeier fueron pronunciadas en una ceremonia de conmemoración en Fürstenfeldbruck en el 50 aniversario de los hechos.
En la mañana del 5 de septiembre de 1972, ocho miembros del grupo terrorista “Septiembre Negro” saltaron la valla de la Villa Olímpica y entraron en los cuarteles del equipo israelí y mataron a dos de sus miembros y mantuvieron a nueve más como rehenes.
Conducidos al aeródromo de Fürstenfeldbruck, la policía germana inició una operación de liberación que acabó en tragedia. Los rehenes israelíes fueron abatidos por los terroristas, al igual que el policía Anton Fliegerbauer. Murieron cinco terroristas y otros tres fueron detenidos.
Steinmeier agradeció a los familiares y al presidente israelí, Isaac Herzog, su presencia en el acto conmemorativo. “Sin todos ustedes, sin los familiares y sin la presencia del Estado de Israel, no podría imaginar una conmemoración digna”, declaró.
El presidente germano rememoró la participación israelí en Múnich 72: “Qué gran señal de confianza fue participar en los Juegos Olímpicos en el país de los autores del crimen contra la Humanidad que fue la Shoah (Holocausto). Entre los atletas y sus entrenadores también había supervivientes de la Shoah”.
Steinmeier explicó que Alemania, que no estaba preparada para un ataque de este tipo, no había estado a la altura de esa confianza.
El mandatario lamentó qu el esfuerzo por mostrar a Alemania en 1972 como una “democracia pacífica y amistosa” fracasó trágicamente en Múnich. Y destacó que, para los asesinos, la Villa Olímpica se convirtió en “un escenario internacional de odio a los judíos y violencia”.
También se cometieron errores tras el atentado, añadió Steinmeier. “Al atentado le siguieron años y décadas de silencio y falta de interés”, manifestó.
El presidente germano sostuvo que muchas preguntas siguen sin respuesta hoy en día, como por ejemplo por qué los terroristas supervivientes fueron deportados tan rápidamente y qué conexiones tenían con los extremistas alemanes.
Los terroristas demandaron la liberación de 232 palestinos cautivos en Israel, así como de los líderes del grupo terrorista alemán Fracción del Ejército Rojo (RAF) y un japonés.
Steinmeier también destacó que sería bueno que el Gobierno alemán proponga ahora la creación de una comisión germano-israelí de historiadores para arrojar más luz sobre este oscuro capítulo.
Hace escasos días, los familiares supervivientes de las víctimas israelíes llegaron a un acuerdo con el Gobierno alemán, que fijó en 28 millones de euros (27,8 millones de dólares) la indemnización por el sufrimiento causado.
El presidente de Israel acogió con satisfacción la indemnización a los supervivientes del asesinato olímpico de 1972 en Múnich. “Se trata de un paso importante, justo y moral”, dijo en Fürstenfeldbruck y agradeció expresamente a Steinmeier sus “grandes esfuerzos”.
Herzog recordó que al dolor de las familias se sumaba el de la indiferencia y el sentimiento de abandono. En este contexto, también agradeció a Steinmeier el que consideró un “valiente e histórico discurso”.