En la actualidad, existe una gran necesidad de generar espacios de conciencia en torno a las diferentes realidades que viven miles de salvadoreños en relación con el bienestar de nuestra salud mental. Este es un tema que me apasiona y que me exige prepararme para aportar y no desinformar.
En redes sociales, observé un evento abierto organizado por la Universidad José Simeón Cañas (UCA), una invitación realizada por el Departamento de Psicología y Salud Pública, en el cual se abordó el tema: “La salud mental del adulto mayor en la pandemia y postpandemia”.
Al iniciar el evento, se hizo énfasis en que este evento era parte de una jornada sobre salud mental y adultez mayor, la cual estaría conformada por varios eventos en los días finales de septiembre y los primeros días de octubre.
Decidí asistir a este evento organizado por la UCA, donde se presentó una investigación realizada por la Dra. Sonia Chalup, profesora emérita de la Universidad Autónoma Gabriel René Moreno (Bolivia), PhD en salud integral y máster en psicología clínica.
Al iniciar la ponencia, fue muy interesante conocer los resultados de una investigación realizada en tiempos muy críticos de la pandemia a ciudadanos bolivianos adultos mayores. Me llamó aún más la atención que la inspiración para dicho estudio provino de su padre, quien falleció años antes del inicio de la pandemia.
El ser humano, a lo largo de la historia, se ha estado siempre reinventando y está en constante cambio. A pesar de esta impresionante característica, es muy interesante estudiar la conducta y el comportamiento de los seres humanos en circunstancias extremadamente atípicas a nuestra cotidianidad, como lo fue la pandemia del COVID-19.
Para realizar este estudio, la Dra. Sonia Chalup tomó en cuenta tres interrogantes que definieron su línea de investigación: ¿Cuáles son los factores de salud mental en pandemia? ¿Cuáles son los factores de salud mental postpandemia? ¿Cuál es la demanda que tiene la salud mental durante la pandemia? Estas tres interrogantes estaban enfocadas en la población de adultos mayores en Bolivia.
Paradigmas Sociales:
Los factores de salud mental en adultos mayores difieren de los de la población general, ya que poseen características especiales de su etapa de vida. Han superado muchas dificultades, han perdido familiares y seres queridos; estas y otras realidades hacen que los adultos mayores tengan un sentido más claro y objetivo de la vida, a pesar de su edad.
En las sociedades de Latinoamérica, encontramos paradigmas muy arraigados que nos impiden acceder a tratamientos o buscar ayuda profesional, independientemente de la etapa de nuestra vida. A pesar de que la salud mental está tomando un nuevo rumbo de beneficios para las sociedades, lamentablemente, aún existen muchos tabúes en torno a este tema.
Dentro de estos paradigmas, uno de los más influyentes es el de los factores sociales y ambientales. Es decir, el primer grupo que influye en nuestra salud mental es nuestra familia, nuestros amigos, nuestro grupo de estudios, nuestro trabajo y todas las condiciones sociales que experimentamos a diario, como el tráfico, entre otros.
Según los resultados de la investigación presentada por la Dra. Sonia Chalup, durante la pandemia, los adultos mayores de Bolivia se sintieron amenazados de muerte a causa del aislamiento. Muchos de ellos ni siquiera contaban con un seguro médico, y la forma en que los medios de comunicación manejaban la información aumentó su sensación de vulnerabilidad.
Estos encierros fueron muy difíciles por lo mencionado anteriormente, pero también porque muchos adultos mayores no tenían un empleo formal; pertenecen a la categoría de negocios informales y deben trabajar y buscar sustento a diario, pues un comerciante no se jubila.
En estos tiempos de encierro obligatorio, también se privó a muchos adultos mayores de educación y cultura. No podían participar en actividades, se encontraban cognitivamente aislados e inactivos, y no contaban con actividades que los mantuvieran alejados de posibles síntomas de ansiedad y depresión. Por otro lado, nadie estaba trabajando con ellos en relación con el estrés la ansiedad y depresión durante la pandemia.
A pesar de mencionar estos aspectos, es muy importante compartir la conducta que tuvieron los adultos mayores entrevistados. Es sorprendente observar que la población adulta mayor es mucho más pasiva, menos conflictiva y más comprensiva. Además, los hombres adultos mayores son más sociables que las mujeres.
Paradigmas Biológicos:
Las personas adultas mayores en su mayoría no son neuróticos, ellos ante el ataque y situaciones de pandemia no mostraron síntomas de neurosis, mantuvieron un estado de salud mental estable en su mayoría. Son poco impulsivos, mucho más racionales y mucho más pasivos.
Su vulnerabilidad biológica ante síntomas del estrés, ansiedad y depresión fue muy baja, más que todo por todas las experiencias vividas a lo largo de su vida, experiencias duras y fuertes, por otro lado, bien se sabe que los europeos son más depresivos y más aislados.
Aspectos cognitivos:
Según investigación realizada por Dra. Sonia Chalup se pudo observar que la autoimagen de los adultos mayores es alta, no se sienten menos que nadie, tienen una autoestima alto, las irracionalidades cognitivas tienen que ver con aspectos fundamentales sobre su vida como sobre su futuro, pensar en la muerte, a pesar que los adultos mayores son muy conscientes de estas realidades estas no afectan a la mayoría de personas entrevistadas.
Los adultos mayores ya no esperan ser los mejores en nada, no buscan protagonismo, se conforman con lo que son, sus expectativas de auto eficiencia son bajas, les da temor tener que depender de otras personas, las expectativas de auto valerse por sí mismo son bajas, ellos esperan ser ayudados, esto también tiene que ver con bajos recursos económicos, pues no tienen recursos suficientes para vivienda, no tienen seguro médico, necesitan mucho de ayuda y colaboración.
Como mencionamos anteriormente es necesario recalcar que los adultos mayores se valoran a si mismo a pesar que puedan padecer algún problema físico, el hecho de experimentar las circunstancias de una pandemia tienen pensamientos muy positivos, tienen sabiduría, valoran que están vivos, tienen alta tolerancia a la frustración, van tolerando todo tipo de frustración.
Paradigmas sistémico Familiar:
La mayoría de personas entrevistadas se han mantenido casadas a largo plazo, son matrimonios que han prevalecido ante los tiempos y los cambios, se sienten satisfechos de haberse casado.
Las personas entrevistadas tienen una alta satisfacción de la vida que han llevado, alegres del compromiso que han adquirido con su familia, su desarrollo personal, éxito económico, y la mayoría no tiene miedo de su futuro.
Sus convicciones religiosas son muy arraigadas, el hecho de tener fuertes vínculos religiosos y servicio a las demás personas especialmente a su familia ayuda mucho a explicar su autoestima, su confianza, su sabiduría y son personas que son muy serviciales.
Existe una etapa en el ser humano donde se siente parte del todo, no se siente solo, Dios en todo, Dios en mi, si muero, mi muerte no se va a la nada, me voy con Dios, soy parte de un todo, soy parte del universo, esto es más marcado en las mujeres.
Post pandemia:
Es un gran beneficio para la salud mental de los adultos mayore el hecho de que puedan crear vínculos de amistad entre otros adultos mayores, esto permite que puedan tener conexiones con personas que han pasado circunstancias similares y puedan ser empáticos ante las situaciones y circunstancias que viven otros adultos mayores.
Los vínculos familiares es una fuente de ayuda mutua entre hermanos, pareja, hijos. El hecho que los adultos mayores tengan hijos mayores y estos creen vínculos familiares (es decir que formen su hogar) crean condiciones difíciles para los adultos mayores, esta circunstancia pueden ponerlos en situaciones de riesgo donde sufran abusos de parte de sus cuidadores, esto hace que se cree sentimientos de soledad y abandono.
La relación entre adultos mayores hombre con sus hijos son menos llevaderas de adultas mayores mujeres y sus hijas, al parecer el instinto maternal crea mejores condiciones con sus hijos. Por lo general existe un acompañamiento muy honesto de los adultos mayores a sus hijos y a sus nietos.
Maltrato en adultos mayores:
Los adultos mayores sufren abandono de los servicios básicos, maltrato psicológicos y físicos de parte de sus hijos o personas que los cuidan. Esto se ve mucho más frecuente cuando cuándo padecen enfermedades crónicas, esto puede ser provocado de una manera inconsciente y de un cansancio emocional y mental del cuidador.
Conclusión:
Actualmente existe una gran necesidad de profesionales dedicados a la formación y especialización en temas de salud mental y adultos mayores. Pues en los últimos año y con mucha razón se ha dado prioridad a los estudios de la niñez y la infancia, así como a diferentes patologías como la ansiedad, el estrés, la depresión entre otros al ser las circunstancias más demandadas actualmente.
Hay que ser consciente que todos los beneficios que se pueden lograr por medio de instituciones internacionales o nacionales con intención de ayudar en estos temas están atados a realidades presupuestarias y legislativas.
Es muy necesario generas espacios de formación y difusión, así como realizar más investigaciones que nos ayuden a generar datos precisos de las diferentes realidades y condiciones que como sociedad salvadoreña estamos atravesando.