El personal especializado del Ministerio de Salud higienizó, el martes, el edificio anexo del Hospital Nacional de Niños Benjamín Bloom (HNNBB). Esta labor inició antes de que los primeros pacientes ingresaran a las instalaciones del hospital y, de esa forma, asegurar que el espacio para su atención estuviera limpio y desinfectado.
La jornada fue supervisada por el viceministro de Salud, Carlos Alvarenga, quien junto a las autoridades del hospital verificó que el procedimiento desarrollado en las diferentes áreas e inmobiliario del nosocomio fuera correcto y efectivo.
“Esta labor es para evitar infecciones en este hospital de tercer nivel de referencia para la atención de niños (…); es parte del abordaje de un plan contra el COVID-19, que se desarrolla en todos los hospitales de la red pública y también en el primer nivel de atención”, explicó Alvarenga.
Las desinfecciones tienen como objetivo principal resguardar la vida y seguridad tanto de pacientes como del personal de primera línea, familiares, proveedores y el resto de visitantes. Su implementación constante en hospitales, unidades de salud y diversos establecimientos de atención a pacientes garantizan espacios libres de virus, bacterias y otros patógenos que puedan poner en riesgo la salud.
Los químicos utilizados se impregnan en las paredes, mobiliario y otras superficies hasta por 90 días. “Esto es parte de un protocolo, hay un cronograma establecido para hacer estas jornadas en toda la red hospitalaria y otros establecimientos”, añadió el funcionario.
En los próximos días se seguirá implementando esta estrategia, no solamente por el tema del COVID-19, sino para combatir otros tipos de virus, bacterias y hongos que son parte del hábitat de los hospitales y generan infecciones. “Estamos en los 31 hospitales de la red pública y en todas las unidades de salud, que son más de 750; también en otros centros adicionales del primer, segundo y tercer nivel de atención”, completó el viceministro.