Recuperando el sueño

¡Sigue nuestras redes sociales!

Hoy, que los efectos de lo que hicieron aparecen y lo sufrimos abajo, tratan, que la sociedad vea hacia otro lado.

Pero, la Pandemia ha puesto ante los ojos de todos, las desigualdades, las injusticias, todo lo malo y perverso que han  hecho.

Recuerden

Su avaricia, su desprecio por el pueblo y su negación de nuestras libertades nos llevaron a la guerra civil.

Desmantelaron la capacidad del Estado para incidir en el Desarrollo.

Se han negado sistemáticamente a las reformas de la educación, de la salud, de las finanzas públicas, de la tierra agrícola y los espacios urbanos, de la propiedad en función social, de la capacidad del Estado de intervenir por el bien común.

Impusieron un modelo económico de la especulación financiera, a costa de sacrificar la agricultura y la comida del pueblo, hicieron uso abusivo de los recursos naturales y abandonaron la producción de bienes para el consumo local

Expulsaron a millones de salvadoreños (por la violencia delictiva y la falta de oportunidades) e hicieron de esa tragedia de las familias, su gran negocio con el consumismo y la especulación.

Privatizaron la Previsión Social, y, con la AFP, han esquilmado a los trabajadores con comisiones de usura por "guardarnos" el dinero, lo prestan al Estado y reciben sendas ganancias, por un dinero, que no es de ustedes.

Impusieron la Dolarizaron de la economía, y hoy asustan con una hecatombe, por si se sacan a circulación los colones.

Han hecho, por dos siglos, del Estado y de sus instituciones, su mejor accionista. Desde, el Estado, se apropiaron las tierras de las poblaciones originarias, se hicieron de Bancos, prosperaron sus negocios y No comparten la utilidades de esos negocios con el pueblo.

Precarizaron las condiciones de trabajo, llaman empresarios a los cuentapropistas, levaron a la indigencia a cientos de miles de salvadoreños y se declaran Socialmente Responsables.

Se apropiaron, usufructuaron, robaron, recursos públicos en detrimento de la gente más sufrida y olvidada. Y se molestan cuando les piden que devuelvan lo robado.

Endeudaron al país, a niveles de insolvencia, de asfixia, para no pagar sus impuestos, para no cumplir sus obligaciones con la nación y asumir el costo de sus errores; siempre, le pasan la factura al pueblo.

Niegan, mancillan, entorpecen la esperanza del pueblo por un país mejor (algunas veces a fuego de metralla, de muerte, de cárcel, de tortura, de magnicidios)

Celebran que han derrotado la cuarentena y que el pueblo recuperó sus "libertades constitucionales", vaya cosa, pero no dicen, que lo que quieren es que otros mueran por ustedes.

Y, cuando la gente, el pueblo, ve un rayito de luz en su penumbra, que le alumbra de nuevo su esperanza y se dispone a abrazar un nuevo normal; se lanzan furiosos, con todo su estamento de adláteres y advenedizos a contener al pueblo, a negar la luz, a querer preservar la oscuridad.

Quizá, esta vez, también podamos derrotarlos. y, recuperemos el sueño de una patria libre, justa y democrática..

¡Hola! Nos gustaría seguirle informando

Regístrese para recibir lo último en noticias, a través de su correo electrónico.

Puedes cancelar tu suscripción en cualquier momento.

spot_img

También te puede interesar

Participe con su comentario

Francisco Martínez
Francisco Martínez
Columnista y analista de ContraPunto. Consultor en temas sociolaborales, exdirigente sindical y exmilitante insurgente. Con experiencia en capacitación y organización popular, formación en finanzas corporativas y gestión de recursos humanos.
spot_img

Últimas noticias