Los diputados de la Asamblea Legislativa ratificaron con 61 votos el Decreto Legislativo 661, el cual contiene la Ley Especial de Emergencia por la Pandemia por COVID-19, Atención Integral de la Vida, la Salud y Reapertura de la Economía.
La normativa establece un estado de emergencia nacional durante 15 días, además de la posibilidad de extender el período de cuarentena de no aplanar la curva, planteaba tipos de cuarentena y aislamiento, así como las personas sujetas a este confinamiento. También, plantea normas de transparencia en el uso de los fondos públicos.
Además, estipula medidas para garantizar el derecho al trabajo y permite la reanudación gradual de las actividades laborales, económicas y administrativas, en el sector público y privado, en el marco del respeto a la institucionalidad democrática y a los derechos humanos; consigna cuatro fases para reactivar la economía, así como las medidas de higienización y estabilidad laboral.
La ley tiene como premisa la salud de los salvadoreños, disminuir los contagios por COVID-19 y apoyar a los ciudadanos en su economía familiar.
Le deja la potestad al Ministerio de Educación Ciencia y Tecnología para la reanudación de las actividades académicas.
Hasta este jueves, la Asamblea recibió el decreto 661 vetado por el presidente de la República, por considerar que era inconstitucional. La ley que hoy se ratifica es el resultado de un esfuerzo conjunto entre el Legislativo y delegados del Gobierno, quienes, durante cinco días consecutivos y en largas jornadas, buscaron acuerdos y consensos, logrando entre el 80 y 90% de coincidencias.
A ese respecto, se refirió el diputado arenero, René Portillo Cuadra, dijo que “En esta ley, se contenían las fases para la reapertura de la economía de manera ordenada, con medidas sanitarias, estableciendo una gradualidad en el ejercicio del trabajo y de los centros de trabajo; en esta ley que el presidente vetó, se establecían normas de transparencia en el uso de los fondos públicos y esa es la verdadera razón por la cual vetó la ley, porque en las negociaciones el pueblo salvadoreño fue testigo de cómo se opusieron reiteradamente a las normas de transparencia en esos fondos públicos. Esta tarde, con la superación del veto, ha ganado la democracia, la institucionalidad, pero sobre todo la esperanza de un pueblo trabajador, de un pueblo que no se va a doblegar ante situaciones de orden tiránica”.
De igual forma, la diputada efemelenista, Cristina Cornejo, expresó que, con la ratificación de la ley, se garantiza una legislación que permita atender la pandemia “por más desinterés del Ejecutivo. Este es el veto número 28 en un año de gestión del actual presidente de la República; con los dos nuevos vetos recibidos hoy, son 13 vetos en el marco de la emergencia del COVID-19…En el tema de salud, no estuvimos en diferencia, en lo que no estuvimos de acuerdo es en la transparencia, en el manejo de los fondos públicos, en el acceso a la información, en la restricción de las garantías constitucionales y en la suspensión del transporte público. Presidente, estamos abiertos a un diálogo, a un entendimiento sin que esto tenga que ver con un tema de vulneración a los derechos constitucionales”.
