“En un total de 83 economías en el mundo, 200 millones de mujeres inician un nuevo emprendimiento”, según Cándida Brush, vice Rectora de Liderazgo de Emprendedurismo Global de Babson College. Las cifras evidencia la participación de las mujeres en emprendimientos como clave para generar valor a la sociedad.
La vice Rectora fue una de las ponentes de la III Conferencia Euro-Americana de Mujeres Líderes 2017: Mujeres como generadoras de desarrollo y riqueza, realizado por el Centro de Liderazgo Colaborativo y de la Mujer, de INCAE y Voces Vitales en Costa Rica.
Los ponentes hablaron sobre las claves para convertirse en emprendedoras en áreas como tecnología, sectores del ámbito privado y público, así como el desarrollo de emprendimiento corporativo e independiente. Ellos plantearon a través de sus experiencias y datos de estudios realizados sobre la importancia de generar emprendimiento femenino en la región, y lo que hay que hacer para lograrlo.
“Las mujeres requieren mayor formación en negocios, en entrepreneurship y aprender a querer más las cifras, para empezar a invertir en sectores de un alto valor añadido, contar con mayor diversidad en la alta gerencia, tener más programas especializados para mujeres y contar con más financiamiento a través de programas y becas”, comentó durante su presentación Camelia Ilie, Decana de INCAE.
Ilie, destacó que está demostrado que los países con un menor PIB per cápita se benefician aún más de la existencia de los emprendimientos femeninos. Ante ese panorama la especialista considera de vital importancia promover proactivamente el emprendimiento femenino en América Central.
Según datos que la especialista presentó sobre entrepreneurship en el mundo, éste genera empleo, innovación, competitividad, desarrollo económico, filantropía e impacto social. Como ejemplo citó el impacto del programa Goldman Sachs 10,000 Women Initiative, donde se evidenció que después de este programa las mujeres, de cada dólar ganado reinvirtieron el 90% en educación, salud y nutrición, versus un 40% de los hombres.
Sin embargo, aún hay barreras personales y del entorno que deben superarse para poder llegar a tener mayor emprendimiento femenino.
La Directora de Investigación del CLCM, Susan Clancy, mostró como en las características de personalidad de un emprendedor exitoso el género no es relevante, sino que ser extrovertido, tener apertura a la experiencia, estabilidad emocional, estar consciente de los asuntos y ser capaz de lograr acuerdos.