Periodistas cubanos reciben apoyo de gobierno, tras exilio de su país

Asistencia humana y migratoria recibieron los periodistas de ADN Cuba, Héctor Valdés y Esteban Rodríguez. Vivanco, de HRW, celebró el gesto, e indicó la importancia de defender la libertad de prensa.

Por: Alessia Genoves


Amenazados, perseguidos y encarcelados fueron por el gobierno de la República de Cuba. Estuvieron ocho meses en prisión hasta ser exiliados, con la idea de “recibir asilo político” en Nicaragua. A los periodistas les cerraron las puertas, tras “recibir la notificación por altavoz” para ser rechazados.

Héctor Valdés y Esteban Rodríguez son sus nombres, periodistas de la revista audiovisual ADN Cuba. “Como hoja al viento”, viajaron durante 36 horas desde el aeropuerto de La Habana (Cuba), hacia el de Tocumen (Panamá); para luego arribar al de Managua (Nicaragua) y finalmente llegar a San Salvador. Desahuciados, pidieron ayuda para regresar a su país, con la “inminente amenaza de ser procesados”.

Íbamos con destino a Nicaragua, tras no ser aceptados en nuestra isla. En Nicaragua, al no acaptarnos en su país, pues nos vimos obligados a vagar por varias horas en San Salvador, donde el director de migración, y el equipo de migracíón también acá en el aeropuerto, nos dio la posibilidad de sentarnos, expresar y escuchar nuestra situación”, explicó a la prensa Héctor Valdés, tras arribar al país.

Tras llegar a San Salvador, los periodistas desconocían su estatus migratorio legal. Su objetivo era “pedir ayuda”. Recibieron asistencia humanitaria, y hospedaje por las autoridades migratorias, por “ordenes del presidente” salvadoreño, Nayib Bukele, hasta solucionar su “limbo migratorio”, con una “salida legal”, según declaró el titular del Ministerio de Migración y Extranjería, Ricardo Cucalón.

Arresto, exilio y El Salvador

Periodistas y activistas políticos eran Rodríguez y Valdés. Pertenecían al Movimiento San Isidro, una organización social caracterizada por la “incidencia en la protección, promoción y defensa de los derechos civiles y culturales en la Cuba presente y futura”.

Surgió como una respuesta disruptiva tras la aprobación del decreto 349, de las “Contravenciones de las Regulaciones en Materia de Política Cultural Sobre la Presentación de Servicios”. La regulación establece, entre otras cosas, la inspección de la colocación de carteles, y sanciona el contenido “indisciplinario”. Además, establece sanciones económicas y carcelarias a las infracciones leves, graves y muy graves.

Esteban Rodríguez fue detenido tras presenciar un acto de manifestación popular, precedido por el Movimiento San Isidro, y otras organizaciones sociales. Fue aprehendido el 30 de abril en la Calle Obispo, sin recibir juicio durante ocho meses, en la cárcel Combinado del Este de la Habana.

Con ampollas en sus miembros, Rodríguez llegó a El Salvador. Explicó que su testimonio es “muy importante para la causa”; ya que en prisión conoció a varios presos políticos como el periodista Luis Robles, Lázaro Esval y otros.

Detalló que la oposición recibe métidos de castigo, al recibir “maltrato físico y psicológicamente”. Además, asegura que a en cárcel “lo meten, por más de 72 horas por gusto, esposados de manos y pies”; además de “actos de bullying”, la re-victimización de los presos, largas condenas, entre otras cosas.

Si me fui de Cuba, dejé mi familia atrás. ¡Y me duele!. Dios sabe el dolor tan grande que tengo de tomar ésta decisión. Sólo Dios sabe el dolor que tengo, después de ocho meses de estar preso, haber tomado ésta desición: dejar todo, a mi familia, a mi mamá, a todo el mundo, dejarlo atrás. (Cuba) es un país que simplemente no perdona a la persona que piensa diferente. Es un país que simplemente no te deja manifestarte libremente; es un país que no te deja ser libre”, explicó Rodríguez.

Rodríguez fue liberado después de ser apadrinado por el diputado del partido VOX, de España, Iván Espinoza de los Renderos, quien comulgó con la idea de que en Cubatratan de acallar la voz, quienes en forma pacifica han estado en la defensa de los derechos más básicos de los cubanos, del derecho de los cubanos a tener derechos”, dijo en su momento.

Sin dinero, y “sin ingerir alimentos” más que café,, Valdés y Rodríguez pernoctaron al interior del Aeropuerto Internacional de San Salvador, con el temor de ser penalizados si salía de ahí.

Periodistas y El Salvador

Vadés y Rodríguez fueron acogidos por las autoridades migratorias, desde ayer. Los periodistas celebraron la acción del gobierno, definiéndolo como “libre” y “democrático”, al recibir a dos periodistas cubanos, que aseguraron haber sido detenidos por causas políticas.

La comunidad internacional externo sus valoraciones. Por su parte, el titular de la organización Human Right Watch, José Miguel Vivanco, destacó el precio político del gobierno de Bukele, al recibir a los periodistas.

Valoro la decisión del gobierno de El Salvador de acoger a los periodistas cubanos Héctor Luis Valdes y Esteban Rodríguez. Es fundamental que los gobiernos respeten, en todo momento, la libertad de prensa y el derecho al asilo frente a persecuciones”, indicó.

Las valoraciones de Vivanco contrastan con la acusaciones que desde su organización impuso al gobierno de Bukele, al que acusó como “anti-democrático”, y definió como una “dictadura”, tras la sanción del oficialismo a favor de la destitución de cinco magistrados de la Sala de lo Constitucional, y del ex-fiscal general, Raúl Melara.

Al mismo tiempo, la organización que les ofreció apoyo humanitario, la Asociación de Periodistas de El Salvador, ha externado opiniones distintas de las de los cubanos. Su percepción deriva de cerca de 209 denuncias acumuladas que hizo contra autoridades de gobierno, el crimen organizado y activistas políticos, contra la libertad de prensa. Define al gobierno salvadoreño como el principal agresor, y defiende al “periodismo incómodo”, pese a controversias legales.

Con diferencia de Cuba, en El Salvador existen medios de comunicación en circulación, constituidos como empresas privadas y organizaciones no gubernamentales. Si bien es cierto, las instituciones gobiernamentales cuentan con una prensa única, existe periodismo, y comunicación social de activistas políticos que se oponen al gobierno.

Otros expertos cuestionan los lazos de solidaridad entre El Salvador y los periodistas Rodríguez-Valdez. Al mismo tiempo, presumen que las relaciones diplomáticas podría debilitarse. Las primeras reacciones ya comenzaron a manifestarse. Por ejemplo, la embajada cubana difundió la opinión ciudadana de un miembro de la Red Solidaria Operación y Misión Milagro, que definían al gobierno de Bukele como un “animal” y como un “corrupto”, defendiendo e a las políticas del gobierno del FMLN.

El última instancia, la cuenta de Twitter de la Embajada de Cuba en El Salvador ha divulgado propaganda anti-estadounidense, en condena al bloqueo económico y a la manipulación de la prensa. Ya desde el pasado 26 de diciembre también denunciaba que la cuenta oficial de Cuba El Salvador fue hackeada en el país.