Por Gabriel Impaglione.
El anunciado ataque yanki a Irán no tardó dos semanas, como prometió Trump, sino algunas horas. Los movimientos tácticos de cazas, bombarderos, portaviones, submarinos y logística se hicieron en tiempo y forma y la “faena” se puso en marcha. Aunque el vicepresidente Vance haya dicho que “EEUU no debería entrar en el conflicto”, al otro día, o sea ayer, los bombardeos a tres plantas nucleares volvieron a tensar los nervios del planeta. Natanz, Infansan y Fordow resultaron destruidos y Trump lo celebró con su consabido “trumpfalismo” ante las cámaras. La OIEA señaló que no se detectaron fugas radioactivas luego de los ataques. No sé/ no sabemos cuál es la verdad, pero si se atacan centrales nucleares y se destruyen, entonces, cómo no hay fugas radioactivas? O no se destruyen, en realidad, o fueron convenientemente desalojadas antes de las bombas. Si esto último es lo que sucedió, Irán sabía muy bien del peligro. Irán procesa uranio y plutonio con fines pacíficos. La remake del film “Irak y sus armas químicas” ya no causa el mismo efecto en los espectadores. (ojalá)
Occidente dice que Israel “está ganando la guerra”. para qué entra EEUU entonces? Resistiría Israel, solo, los embates misilísticos de Teherán? Seguramente no.
Israel bajó la producción de gas en un 70% por los misiles iraníes. El problema energético no es asunto menor.
Cada misil “tamir” del sistema defensivo “cúpula de hierro” cuesta un promedio de 100 mil dólares. Los “arrows” antimisiles son mucho más costosos: 3,5 millones de dólares cada uno. Los misiles del sistema defensivo “Honda de David” valen un millón de dólares por unidad. Son decenas de disparos que realiza Israel al día. Esto es demasiado dinero para una economía en serios problemas.
Para abandonar Israel se debe presentar demanda al “Comité de excepciones” del Gobierno, la salida del pais está prohibida y esto genera causas judiciales por parte de la ciudadanía. Hay manifestantes con pancartas contra las guerras en varias ciudades israelitas.
Israel tiene 90 ojivas nucleares. Irán: ninguna. Israel está afuera de los tratados internacionales sobre armas nucleares y no acepta revisiones de la OIEA. El tratado de No proliferación de armas nucleares entre EEUU e Irán no está en vigencia porque EEUU se retiró. El acuerdo, ergo, no existe.
El Congreso de EEUU estudia la situación, la Constitución dice claramente que una guerra debe ser aprobada por los parlamentarios. La decisión de Trump es ilegal, viola la Carta Magna estadounidense si esto significa “entrar en guerra”. El valor de las palabras / la confusión que generan los eufemismos. Qué tipo de convulsiones internas aparecerán en el pais del Norte? Socavará este asunto -aun más- la presidencia? En seis meses este empresario ha dado mucho que hablar al planeta y, esto, no termina aquí.
Teherán dijo que “El conocimiento está a salvo, esperábamos el ataque, hemos desalojado el lugar. Podrán destruir físicamente las instalaciones. El conocimiento queda aquí”.
Yemén anunció que entra en el conflicto del lado iraní, lo mismo declaró Corea del Norte. La OTAN está en alerta máxima. Mientras en esta plano se activan alianzas y declaraciones, la fábrica de la bomba antibúnker lanzada por un bombardero B2 yanki sobre la subterránea central nuclear de Fordow hace cálculos optimistas, se prevé un alza importante de sus acciones en la Bolsa. Cada bomba cuesta dos mil millones de dólares.
Occidente evacúa sus ciudadanos de Líbano. La prensa árabe dice que hay movimientos militares en este país y en Siria.
El plan israelí de derrocar al Ayatollah Kamenei cambió a “garantizar la paz destruyendo la capacidad nuclear-militar de Teherán”. En suma, la cosa pasa por hacerse de la hegemonía en Medio Oriente. Es un territorio estratégico fundamental para Israel. O sea, para Estados Unidos. Por el estrecho de Ormuz pasa un tercio del crudo del planeta. Cualquier interrupción de este flujo dispararía los precios de petróleo a valores jamás vistos en todo el mundo. Además, desde Medio Oriente, se alcanzan objetivos críticos en China, Rusia y Europa. Acá no se tironea de qué dios es más grande ni qué camiseta es más bonita, no es cuestión de izquierda o derecha ni de sur o norte. La pulseada por los casilleros estratégicos en el juego geopolítico es entre buenos amigos que a los largo de la historia han ido juntos de vacaciones por el mundo.
Que no te confundan. La Historia dice otra cosa. Irán se defiende del ataque israelí. Cuando Israel comprueba que no puede solo cumplir su objetivo llama al bulo del barrio. Ahora las cosas se han puesto muy difíciles. Si quisieron agregarle distracciones a Moscú y Pekín, el tiro, todo lo indica, les salió por la culata.
Mundo unipolar o mundo multipolar? Esa es la cuestión.
En tanto… la gente es la que queda siempre bajo las bombas.