MADRID – El escritor Horacio Castellanos Moya se pronunció sobre los últimos hechos en torno a la muerte del poeta Roque Dalton originados a la luz del cambio de gobierno en El Salvador. Castellanos Moya aboga por no dejar impune la muerte del poeta y periodista; y además, reivindica el derecho de la familia a saber la verdad.
El pasado cuatro de junio, el presidente Nayib Bukele ordenó, vía Twitter, remover de su cargo al hasta entonces titular de la Dirección de Protección Civil, Jorge Meléndez, y lo señaló como “acusado del magnicidio de nuestro poeta Roque Dalton”, el cual ocurrió en 1975. Meléndez, conocido como “Jonás” durante la guerra civil, es acusado junto a Joaquín Villalobos como autores de la muerte de Dalton, quien militaba junto a ellos en el colectivo insurgente de lo que a la postre se conocería como el Ejército Revolucionario del Pueblo (ERP).
Castellanos Moya, quien en toda su obra repasa la historia salvadoreña, considera esta acción como “un buen comienzo” por parte del nuevo Ejecutivo. “Ojalá que (el nuevo presidente) siga con ese pensamiento en términos de que no dejar casos impunes, su familia tiene todo el derecho de saber la verdad”.
Agregó que todos los involucrados en este caso y no sólo Meléndez o Villalobos deben contar todo lo que pasó en aquellos días de mayo de 1975. “Y sobre todo, saber dónde lo enterraron”, dijo.
Además, Castellanos Moya fue contundente al referirse al intento del FMLN por sacar adelante la llamada Ley de Reconciliación Nacional, que no es otra cosa sino una nueva ley de amnistía: “el FMLN en ese tipo de expresiones políticas muestra que el ejercicio del poder lo ha corrompido un poco, sino mucho”, sentenció.
El autor de libros como “Moronga” y “El Asco” se encuentra en Madrid durante los primeros días de junio, ya que Casa de América le dedica su “Semana de Autor”. En la primera de las conferencias, donde se trató el papel de la política impregnada a lo largo de su obra, también se habló de Roque Dalton, algo que califica como “natural”.
“Roque Dalton es el escritor más conocido de El Salvador; no sé si felizmente por su obra, que es estupenda, pero por su caso, por su muerte, por su forma de morir y por su forma de vivir también. Me parece natural”, dijo.