El Fondo Monetario Internacional (FMI) aseguró que El Salvador tendrá para finales de este año, una caída del Producto Interno Bruto del 9 %, la cual sería la más fuerte hasta ahora pronosticada en Centroamérica.
Esta proyección confirma que el país compartirá espacio con Panamá con -9 %, ya que Costa Rica estaría en el orden del -5.5 %; Guatemala, un -2.2 %; Honduras, -6.6 % y el PIB de Nicaragua caerá un 5.5%.
En promedio, el FMI realiza una previsión conjunta que prevé una recesión del 5.9 % este año para la región, a la que seguirá una recuperación que llevaría a crecer el 3.6 % su PIB en 2021.
América Latina y el Caribe será la región más golpeada del mundo por los efectos económicos de la crisis sanitaria, dado que muchos países estarán "severamente afectados" al enfrentar profundas recesiones, señala el informe.
Las perspectivas para América Latina y el Caribe es un desplome de la economía de la región del 8.1 % para este año por el impacto de la paralización de la actividad productiva por la pandemia de covid-19, esto es 1.3 puntos menos que en los cálculos del FMI del pasado junio.
Para 2021, la institución empeora ligeramente sus anteriores previsiones al situar el crecimiento en la región en 3.6 %, frente al 3.7 % que pronosticó en junio.
Según las proyecciones, el decrecimiento mundial alcanzará –4.4 % en 2020; o sea, una contracción menos grave que la pronosticada en junio.
El crecimiento mundial está proyectado en 5.2 % en 2021, un poco menos que lo pronosticado, dado que la desaceleración prevista para 2020 será "más moderada" y es consecuente con las expectativas de persistencia del distanciamiento social.
Según las proyecciones, tras el repunte de 2021, el crecimiento mundial irá enfriándose hasta rondar 3.5 % a mediano plazo. Esto representa un revés a la mejora proyectada de los niveles de vida promedio de todos los grupos de países.
"La pandemia borrará el progreso realizado desde la década de 1990 hacia la reducción de la pobreza mundial y agudizará la desigualdad", señala el documento.
Se estima que este año, casi 90 millones de personas podrían caer por debajo del umbral de privación extrema de $1.90 al día.
Además, las perspectivas de bajo crecimiento van acompañadas de "un significativo aumento" proyectado del "stock" de deuda soberana.
