El abogado y politólogo, Benjamín Cuellar, aseguró que el nombramiento cardenalicio del sacerdote jesuita checo-canadiense, Michael Czerny, llena de alegría la lucha por la defensa de los derechos humanos en El Salvador, pues ha sido un defensor nato de tales derechos.
Cuellar aseguró, que el regocijo radica por el paso de Czerny en territorio salvadoreño, ya que tuvo que asumir la dirección del IDHUCA en el periodo de 1989 hasta 1992, luego que Segundo Montes, fundador del instituto, fuera asesinado junto a otros cinco sacerdotes jesuitas y dos de sus colaboradoras.
“El padre Czerny es un jesuita que iba destinado a presidir la Comisión de Justicia y Paz de la Compañía de Jesús, pero después de la masacre de la U, se ofreció para salir adelante con el caso de la masacre de los seis sacerdotes jesuitas y entonces lo nombraron director del IDHUCA, entre otros cargos”, expresó Cuellar.
Además, destacó que el sacerdote fue un líder en la protección de los derechos humanos y trabajó mucho para que se pudiera llegar a un acuerdo pacífico entre las partes en conflicto durante la Guerra Civil Salvadoreña.
Actualmente, el checo-canadiense es Subsecretario de la Sección Migrantes del Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral de El Vaticano y se ha dedicado a trabajar en África por mucho tiempo, con personas víctimas del VIH.
Czerny habla inglés, francés, italiano, alemán y español. Ha sido sacerdote por 46 años.
Por lo tanto, el 5 de octubre se someterá al consistorio para la creación de 13 nuevos cardenales.
De los 13 cardenales, 10 podrán ser electores en un posible cónclave. Entre los recién nombrados hay dos españoles, un cubano y un guatemalteco. En los hasta ahora cinco consistorios que se han celebrado para la creación de cardenales durante este pontificado, Francisco siempre ha tenido presente a España y Latinoamérica en sus listas de los llamados "príncipes de la Iglesia".
Por otra parte, Cuellar dice que para él este nombramiento es doblemente especial, ya que Czerny fue quien lo “contrató” para que fuera su sucesor en el IDHUCA, institución en la cual estuvo por 22 años.
“Lo conocí en México, por pura casulidad, y nadie me creería pero tengo fotos. En una plática de media hora, me contrato porque se tenía que ir a Roma porque ya había terminado el juicio en contra de los militares acusados de matar a los padres jesuitas”, indicó.
Por lo tanto, aseguró que el nuevo cardenal ayudará mucho al Papa porque es inteligente, capaz y tiene un gran sentido humano.