La exprimera dama de la República, Vanda Pignato, deberá seguir en arresto domiciliario, luego de que el Juzgado Séptimo de Instrucción negara la petición de continuar el proceso en libertad, relacionado a diversos delitos de corrupción que se le imputan.
Pignato recibió la orden de arresto domiciliar el pasado 28 de septiembre del 2018, cuando se encontraba ingresada en el Policlínico Arce del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), sin embargo el pasado miércoles pidió continuar ser procesada en libertad a cambio de presentarse a firmar al juzgado periódicamente y no salir del país.
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Según la acusación fiscal, la exprimera dama habría recibido fondos de su exesposo, el expresidente Mauricio Funes, los cuales provenían de la cuenta de Gastos Operativos de la Presidencia y que la imputada utilizó para el pago de tarjetas, cancelación de préstamos, viajes y otros.
El Ministerio Público denunció a los exfuncionarios de Casa Presidencial manifestando que utilizaron diversos mecanismos del presupuesto de la Presidencia para beneficiarse con $351 millones de dólares que fueron ejecutados como gastos reservados y cubiertos a través de proveedores ficticios.
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Además, el pasado 10 de noviembre de 2016, la Fiscalía acusó a Pignato por simulación de delito, luego que ella mismas acudió a la institución e interpuso una demanda en la que aseguró le habían falsificado la firma en una compra venta de un vehículo Lexus-Lx570, por lo que pidió que se investigara.
Posteriormente, la Fiscalía informó que la firma había sido comparada con documentos de Pignato y que estas supuestamente coincidían con la de la denuncia, por lo que determinaron que no existía tal falsificación.
