La exprimera dama salvadoreña, Ana Ligia de Saca, y su hermano, Óscar Mixco, desconocían de la procedencia del dinero transferido al Grupo Samix, según la comparecencia que hizo el exmandatario, Elías Antonio Saca, ante el Tribunal Cuarto de Sentencia donde se ventila el juicio “Destape por la Corrupción”.
Por este caso, son procesadas 13 personas, entre ellas, la exprimera dama y Mixco, quienes son acusados de lavar más de $17 millones de dólares de fondos públicos.
Producto a este juicio, la defensa de los acusados solicitó el testimonio de Saca, quien a través de una videoconferencia, habló en favor de Ana Ligia.
En la declaración que inició a las 2:40 de la tarde del jueves, Saca también confesó que él, siendo presidente, autorizó el pago de tarjetas de crédito de Ana Ligia de Saca con fondos públicos.
Asimismo, confirmó que su esposa recibía un sobresueldo de $10,000 mensuales en el período en el que él fue presidente de 2004 a 2009.
"Ella le preguntó qué tenía que ver con todo este caso y él le respondió, tú no tuviste conocimiento, no tuviste nada que ver, las decisiones las tomé yo como presidente", dijo el abogado defensor de Oscar Mixco Sol hermano de Ana Ligia de Saca, Eduardo Cardoza, quien fue el que solicitó que el expresidente declarara en el juicio.
Otro de los delitos que asumió Saca, son las transferencias de fondos estatales a Grupo Samix.
Anteriormente, un testigo con régimen de protección, narró la forma en que presuntamente, triangulaban el dinero de Casa Presidencial hacia la empresa Grupo Samix.
Según la Fiscalía General de la República (FGR), el testigo señaló que los registros contables del Grupo Radial Samix (empresas de Saca), “fueron manipulados con el afán de mostrar una verdad que no era lo que realmente estaba sucediendo”.
Asimismo, manifestó que el expresidente quería mostrar que las empresas del Grupo Samix, tenían suficientes ventas, cuando, según el testigo; los ingresos provenían de presuntamente de una fuente ilícita.
Por otra parte, el testigo señala la función que ejerció cada uno de los ahora imputados, señala que el auditor externo, Milton Avilés, conoció las irregularidades que estaban sucediendo, pero supuestamente hizo caso omiso y firmó informes de auditorías donde se eliminaban estas observaciones contables.
También, el testigo declaró que Avilés, era el encargado de avalar; mediante el desarrollo de procedimiento de auditoría, las operaciones que desarrollaba el Grupo Radial Samix. Dicha validación la ejercía directamente él, o la delegaba a auxiliares de auditoría, bajo su supervisión.
Además, declararon dos personas que dijeron que a ellos les pidieron abrir unas supuestas sociedades, narrando que la firma ‘Tóchez Fernández’ fue la que los utilizó para la creación de estas sociedades, haciéndoles creer después que les compraba las sociedades.
"El traslado de dinero desde Capres hacia las sociedades se hacía a través de simulaciones de pautas publicitarias. Aparentemente estas sociedades le prestaban a Presidencia, pero definitivamente nunca prestaron ese servicio sino que fueron servicios simulados y así es como llegaron a obtener ellos el dinero", señaló la representante del Ministerio Público.
Por lo tanto, el exmandatario asumió toda la responsabilidad de que él junto a tres de sus ex funcionarios sustrajeron $301 millones de las arcas del Estado.
Por su parte, el abogado defensor de la exprimera dama, Miguel Ángel Flores Durel, aseguró que con la declaración de Saca se pretendía confirmar que Ana Ligia no fue una persona operativa dentro del plan criminal.
"Ella no fue una persona operativa dentro del plan criminal, que ella no formó parte de ese plan criminal, que ella jamás conspiró y nunca realizó un procedimiento sofisticado en el sistema financiero bancario», agregó en ese momento el abogado defensor de la exprimera dama.
Flores afirmó que Ana Ligia de Saca sí recibió sobresueldos entre los años 2004 y 2009, pero explicó que ella pensaba que era un salario ya que era una práctica que se venía haciendo en anteriores gestiones presidenciales. Flores prevé que el próximo miércoles se den los alegatos finales.
"Ella jamás dispuso de dinero público, ella solo recibió dinero con la creencia de que se le estaba pagando un salario, un sobresueldo, de $10,000 y lo demás ya fue confesado por Tony Saca", aseguró.
Una de las fiscales del caso aseguró que con la declaración del exmandatario lejos de favorecer a la exprimera dama ha dejado demostrado que ella sí tenía conocimiento de los movimientos bancarios que se realizaron. Agregó que con la confesión de Saca su esposa ya no puede afirmar desconocimiento.
“Todo delincuente para cometer este tipo de delitos, de lavado de dinero va a necesitar a alguien de su confianza no va a depositar con alguien que no conoce”, dijo la fiscal al consultarle cómo queda la situación de Óscar Mixco.
La vista pública comenzó el 2 de febrero en contra de la exprimera dama y siete acusados más. Otros cinco imputados fueron separados del proceso, entre ellos, tres fueron separados del juicio por estar enfermos de covid-19 y dos porque confesarán el delito en un procedimiento abreviado que les permitirá recibir una condena de tres años pero que se les reemplazará por trabajo de utilidad pública, también deberán devolver $1.3 millones que lavaron.
Según se ha conocido anteriormente, la Fiscalía acusa a la exprimera dama de haber ayudado a legitimar en el mercado financiera aproximadamente $17.3 millones del total de $301 millones tomados de fondos públicos a manos de una red liderada por su esposo, Elias Antonio Saca, quien actualmente está preso por el delito de peculado y lavado de dinero.
A diferencia del resto de imputados que fueron enviado a prisión y luego recibieron algún tipo de medidas alternas a la detención, Ana Ligia de Saca siempre ha permanecido en libertad condicional.