Un estudio presentado por la Fundación Salvadoreña para el Desarrollo Económico y Social (FUSADES) titulado “¿Cómo reactivar las inversiones en El Salvador?” señala que el país es el que menos crece de Centroamérica en cuanto a inversión privada, debido entre otras cosas, a los índices de corrupción, polarización política y violencia que imperan en el país.
De acuerdo con FUSADES, quien asegura haber consultado a empresarios, los factores principales que frenan la inversión privada es la elevada incertidumbre en las políticas públicas y tributarias, el excesivo nivel de burocracia, la corrupción en las instituciones, la alta inseguridad, entre otras causas.
Subrayan que la tasa de homicidios de El Salvador es más del doble del promedio de América Latina, considerando que la región más que duplica a otras regiones de similar ingreso en el mundo.
“El costo de la seguridad respecto a las ventas fue de 3.4%, muy por arriba del promedio del mundo (1.7%) y de América Latina (1.5%)”, expresa el estudio de FUSADES.
Manifiestan además que la alta polarización de la clase política de El Salvador, el sistema parlamentario más polarizado de América Latina, así como también la sociedad civil, dificultan lograr consensos mínimos sobre apuestas estratégicas, algo que no genera seguridad en inversionistas extranjeros.
“Históricamente la inversión del país ha sido baja, 15.9% del PIB (1991-2016), pero en los últimos tres años observó una disminución a un promedio de 13.7%; por otra parte, la inversión extranjera directa (IED) por más de ocho años ha sido la más baja de Centroamérica, incluso ubicándose por debajo de la mitad del siguiente país con menor inversión en la región.”, expone la ONG.
“Lo que se necesita es mayor inversión; una fórmula simple pero contundente es: a mayor inversión mayor número de empleos e ingresos”, añade el estudio.
Por otro lado, destacan que algunos de los factores más importantes del país para promover las inversiones es a dolarización ha permitido eliminar el riesgo cambiario, controlar la inflación y mantener tasas relativamente bajas y estables.
Además, el sistema privado de pensiones el cual a juicio de FUSADE, continúa sólido a pesar de las amenazas del Gobierno de confiscar los ahorros de los trabajadores
FUSADES sostiene que inversionistas esperan que no existan “los madrugones” en la Asamblea Legislativa, que evitan el debate de las leyes que puedan perjudicarles.