El presidente electo, Nayib Bukele, hizo la primera revelación sobre los miembros de su gabinete con el anuncio de que Alexandra Hill será canciller. Después de que Bukele presentó en Twitter a su futura funcionaria, las primeras reacciones fueron de aprobación.
Hill estudió su licenciatura en la Universidad de Boston y su posgrado lo obtuvo con la Universidad Johns Hopkins. Ha trabajado en el diseño de políticas públicas con el Departamento de Estado de los Estados Unidos, la Organización de Estados Americanos, agencias del sistema de las Naciones Unidas, el Banco Interamericano de Desarrollo y otras agencias.
Además, fue directora de la Fundación Antidrogas de El Salvador (FUNDASALVA) durante varios años. Esta organización inició como un proyecto de su padre, Jaime Hill, quien sufrió por la guerra en la década de los ochenta. Hill ““padre”“, pasó por un período de adicción a las drogas luego de esa época. Cuando superó este capítulo, creó FUNDASALVA con la cercana participación de su hija Alexandra.
Jaime Hill, además, fue concejal de Bukele cuando fue alcalde de San Salvador.
Las primeras impresiones
Óscar Picardo, investigador y académico, explicó que conoció a Hill durante un viaje a Nueva York en el que coincidieron. “Son buenas noticias para el país”, indicó Picardo. “No sé qué tanto conoce de geopolítica. Vivió en Estados Unidos y eso le da una visión más globalista, menos local”, comentó. Para Picardo, esta canciller es otra muestra clara de qué se puede esperar en el gobierno de Bukele, es decir, una orientación hacia Estados Unidos.
Mientras que Rubén Zamora, exembajador de El Salvador ante Naciones Unidas, también mencionó el aspecto de la experiencia alrededor de Relaciones Exteriores. “Hay que dejar ver qué hace. Pero se le va a hacer cuesta arriba, porque ella conoce el extranjero, pero ha sido bastante extraña a la diplomacia”, dijo Zamora.
El alcalde de San Salvador, Ernesto Muyshondt, celebró esta elección: “Es una mujer que cuenta con las capacidades y la idoneidad“. En este sentido, el alcalde dijo que estos mismos criterios deberían aprobarse para el resto de nombramientos del gabinete.
¿Con qué se encontrará?
Abel Núñez, director ejecutivo de CARECEN, organización de migrantes centroamericanos, detalló que están dispuestos a trabajar con la canciller en los temas que ahora preocupan a la comunidad de salvadoreños en el exterior: el fin del Estatus de Protección Temporal (TPS) para casi 200,000 compatriotas y la posible cancelación del DACA. “El objetivo final es que la gente migre porque quiere, no porque está en riesgo su vida”, enfatizó el director de CARECEN.
“Es una posición crítica”, dijo Núñez. “Queremos trabajar juntos para saber cómo podemos dar mayor protección a los salvadoreños en el exterior”, insistió. Entre las medidas concretas que pretenden conversar con Hill son las opciones que tienen los tepesianos salvadoreños de quedarse en Estados Unidos cuando termine el TPS. También hablarán sobre la ejecución del FOSALEX, un fondo especial dedicado a los compatriotas que viven fuera de El Salvador.
Zamora recordó que el gobierno del presidente estadounidense Donald Trump “hay una política de Trump, que es convertir a los migrantes en fantasmas que amenazan a los Estados Unidos” y que Hill deberá enfrentarse a eso.
Marvin Aguilar, analista político, comentó mientras tanto que otras tareas que deberá asumir Hill incluyen “definir la agenda internacional” y cómo actuar frente a socios como Honduras, Nicaragua y Venezuela. Los mandatarios de estos países, hay que recordar, no fueron invitados a la toma de posesión de Bukele. Aguilar además mencionó el tema de la migración como uno de los que encarará Hill.
Luego, Aguilar y Zamora recordaron que está la relativamente reciente apertura de relaciones con China Popular, en detrimento de la que se tenía con Taiwán.
En el período administrativo que está por terminar, Hugo Martínez dirigió la cancillería durante dos períodos, prácticamente. Lo hizo durante el gobierno de Mauricio Funes y durante el de Salvador Sánchez, antes de lanzarse como candidato para las elecciones presidenciales de 2019. En 2013, lo sustituyó Jaime Miranda y en 2018, Carlos Castaneda, canciller actual.
* Con aportes de Jorge Medina
