Con 76 votos, los diputados de la nueva Asamblea Legislativa aprobaron la creación de la Ley de Bienestar Animal. La normativa busca reconocer a los animales de compañía y silvestres como seres sintientes, por lo que se les asegurará el bienestar, buen cuido, manejo y protección integral contra todo acto de crueldad causado o permitido por las personas.
El estatuto tiene diferentes aportes, entre ellos el reconocimiento de los animales como seres sintientes, la tipificación de delitos de carácter sexual, la no mutilación por cambios estéticos y la no experimentación en la industria cosmética.
Esta normativa se fortalecerá con herramientas legales para castigar con penas de entre dos y cuatro años de cárcel a quienes maltraten animales. Esto se debe a reformas a los artículos 261 y 263 del Código Penal, propuestas por los ministros de Justicia y Seguridad Pública, Gustavo Villatoro, y de Agricultura y Ganadería, David Martínez.
Asimismo, los diputados de la Comisión Agropecuaria —que emitió el dictamen favorable para la creación de la normativa— legislaron para que se cree el Instituto de Bienestar Animal (IBA), que estará obligado a proteger a los animales de compañía, promover su bienestar, brindarles una adecuada nutrición y auxilio cuando sea requerido. También deberá garantizar que se lleve un control sanitario, evitar el maltrato, la crueldad y el sufrimiento.
La nueva ley establece una serie de obligaciones para los responsables de animales, entre ellas la identificación de la mascota mediante una placa y microchip; la inmunización contra enfermedades de riesgo zoonótico y la protección contra afectaciones propias de su especie. Para ello, se les deberá llevar un registro de vacunación y procurar el control de la reproducción.
Por otro lado, la normativa manda al Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología (MINEDUCYT) a incluir en su currículo de enseñanza la promoción del bienestar de animales, con el propósito de fomentar el cuido y bienestar de los animales.
La pena de prisión que se le aplicaría a la persona que sea declarada culpable de agresión contra un animal aumentará hasta en una tercera parte cuando se haya utilizado armas, instrumentos, objetos, medios, métodos o formas concretamente peligrosas para la vida animal.
También en los casos que se haga con saña, es decir, con violencia y crueldad; cuando se cause al animal la pérdida o inutilidad de un sentido, órgano o miembro principal; y cuando estos hechos se hubieren ejecutado en presencia de un menor de edad.
Los organizadores de peleas de perros también serán sancionados, de acuerdo a lo plasmado en la ley.
Las reformas propuestas establecen que en caso de que el maltrato infringido haya causado la muerte del animal se impondrá, adicionalmente, la prohibición de tenencia por el mismo plazo de la condena, y la inhabilitación especial en el caso de personas que ejerzan profesión, oficio o comercio que tenga relación con los animales.
Para que la población denuncie hechos de maltrato animal, el Ministerio de Agricultura y Ganadería creará una plataforma para que los salvadoreños hagan llegar a las autoridades la información pertinente.
El Instituto de Bienestar Animal (IBA), que se creará con la entrada en vigencia de la normativa, garantizará que se cumpla lo dispuesto en favor de los animales. Esta Institución también administrará el primer hospital veterinario público denominado “Chivo Pets”, creado con el excedente de $4 millones generado por la inversión en Bitcoin.
Además, se convertirá en una institución autónoma del Ministerio de Agricultura y Ganadería. Esta nueva institución trabajará de manera articulada con las alcaldías, otras carteras de Estado, la Fiscalía General de la República (FGR) y Policía Nacional Civil (PNC).
Toda persona natural o jurídica que se dedique a la cría, venta, hospedaje, guardería y centros de adiestramiento de animales de compañía estará obligada a contar con los permisos de funcionamiento emitidos por el IBA.
Esta disposición se hizo debido a que para los diputados es importante el rastrero de las ventas de animales, no solo en los establecimientos ubicados en determinado lugar, sino también en las veterinarias y en las ventas que se hacen por medio de redes sociales.
Las condiciones para centros de rescate y para vendedores de animales
Cuando el proyecto de ley estaba en estudio en la Comisión Agropecuaria, los diputados invitaron a representantes de diversos sectores que velan por el bienestar de los animales, entre ellos a rescatistas independientes, de organizaciones y del Consejo Superior de Salud Pública para que dieran sus aportes.
La mesa de trabajo estableció que en los centros de rescate se deberá mantener una cantidad apropiada de animales para evitar el hacinamiento y proporcionarles alojamiento, alimento, agua y abrigo, según su especie.
Asimismo, la normativa contempla las acciones que se deberán tomar en caso de agresividad de un animal, entre ellas que los responsables deberán garantizarle un proceso de rehabilitación y readaptación para corregir la conducta.