Alianza Americas condena ataque armado a militantes del partido FMLN y exige justicia

Al igual que en los EE. UU., es urgente poner fin a narrativas basadas en mentiras que promueven el odio y acciones extremistas violentas

El domingo pasado, un ataque armado a un vehículo en el que se transportaban militantes del partido Frente Farabundo Martí para la Liberación Nacional (FMLN) provocó la muerte de dos de sus militantes: Gloria Rogel del Cid y Juan de Dios Tejada, y lesiones a tres personas más. 

Alianza Americas se solidariza con las víctimas y sus familiares. Nuestro director ejecutivo, Oscar Chacón, emite la siguiente declaración: 

“Los hechos violentos perpetrados ayer en El Salvador, en el marco de la campaña electoral actual, son condenables. Ninguna persona debería de perder su vida a consecuencia de participar en procesos electorales, sin importar de qué partido político se trate. Como personas latinoamericanas que rechazamos los actos violentos perpetrados en la capital de los EE.UU. el pasado 6 de noviembre, nos unimos a las muchas voces que han rechazado la violencia política en El Salvador.  

 Al igual que en los EE. UU., es urgente poner fin a narrativas basadas en mentiras que promueven el odio y acciones extremistas violentas. Los graves desafíos económicos, sociales y políticos que la sociedad salvadoreña padece van a requerir de la más amplia concertación en aras de hacer de El Salvador un país verdaderamente próspero para las mayorías, donde se fortalezca la democracia.  

Hacemos un llamado a la Fiscalía General de la República a cumplir con su rol mediante la investigación eficaz de los hechos, y la promoción de las acciones penales necesarias contra todas las personas que resulten responsables. La oportuna y pronta acción del Estado en la investigación y sanción de estos hechos es esencial para evitar que estos hechos se repitan. 

Sin embargo, además de la acción penal, es necesario detener la narrativa de odio y retórica de conflicto que contribuyen a gestar y a fomentar la violencia política. Las altas esferas del poder cumplen un papel decisivo en proteger la democracia y garantizar que no se acuda a la violencia para resolver las diferencias políticas. Hacemos un llamado a que cumplan su papel constitucional y estén a la altura del liderazgo político y ético que El Salvador merece.  

 Es urgente que los partidos políticos en contienda se comprometan a respetar a sus adversarios y a desarrollar una campaña electoral respetuosa de la institucionalidad democrática que tanto ha costado establecer. La sociedad civil organizada debe mantenerse vigilante ante estos últimos sucesos y evitar replicar las narrativas falsas y los mensajes de odio. Nosotros continuaremos nuestra labor de incidencia para la construcción de un país donde menos personas se vean forzadas a huir.”